Líderes cristianos de Jerusalén condenan el bombardeo al hospital de Gaza
- 19 de octubre, 2023
- Jerusalén (Tierra Santa) (AICA)
"Es un crimen atroz, que exige la más severa censura", afirmaron los patriarcas y jefes de las Iglesias sobre la masacre ocurrida en el único hospital cristiano de Gaza, que dejó más de 500 muertos.
"Los Patriarcas y Jefes de las Iglesias de Jerusalén nos unimos en profunda solidaridad con la diócesis episcopaliana de Jerusalén, mientras somos testigos del ataque criminal que se desarrolló dentro los recintos del Hospital Episcopal Anglicano Al-Ahli en Gaza", señalan en un comunicado los líderes cristianos de Tierra Santa, donde subrayan, además, que "este crimen desgarrador" se produjo el mismo día en que se celebraba una jornada de oración "para pedir el fin de la guerra en Gaza".
“En unidad inquebrantable –declaran los líderes religiosos de Jerusalén–, denunciamos con vehemencia este crimen con nuestra más enérgica condena. Las primeras noticias sobre la tragedia del hospital cristiano en Gaza nos han dejado inmersos en el dolor, porque representa una profunda transgresión contra los principios mismos de la humanidad. Los hospitales, considerados refugios sagrados según el derecho internacional, fueron profanados por fuerzas militares".
La nota define la masacre como un “crimen atroz, que requiere la más severa censura y responsabilidad internacional”. Imploramos a la comunidad mundial que acepte su deber sagrado de proteger a los civiles y de garantizar que nunca más se permitan transgresiones tan atroces”. De ahí la oración y el apoyo a la diócesis episcopal de Jerusalén y la petición de "justicia, paz y el cese del sufrimiento que ha caído sobre el pueblo de Gaza".
Crimen contra la humanidad
“Nuestras Iglesias están unidas para condenar esta terrible y devastadora masacre, y la consideramos un crimen contra la humanidad. Pedimos a todas las partes que pongan fin a esta guerra”, afirmó el arzobispo anglicano de Jerusalén, Husam Elias Naoum, en una conferencia de prensa convocada para comentar el ataque al hospital anglicano Al-Ahli, en la ciudad de Gaza.
"Como iglesias, hasta ahora hemos emitido dos declaraciones pidiendo el fin de la violencia en Tierra Santa y que personas de buena voluntad intervengan para detener lo que está sucediendo en esta tierra", añadió Naoum, reiterando la intención de "mantener en funciones nuestras iglesias y instituciones eclesiásticas, no sólo las iglesias anglicanas, sino todas las iglesias. Así como el hospital seguirá abierto, para seguir llevando a cabo nuestra misión médica y nuestra misión pastoral”.
En la conferencia también estuvo presente el Patriarca Latino de Jerusalén, cardenal Pierbattista Pizzaballa, el Custodio de Tierra Santa, Francesco Patton y el rector de la Iglesia Evangélica del Redentor en Jerusalén, Joachim Lenz.
Naoum habló de un "crimen" cometido en el hospital, donde unas horas antes la gente "rezaba por la paz y los niños jugaban" en el patio. Según el arzobispo anglicano, la administración del hospital había recibido un total de tres advertencias israelíes para evacuar el nosocomio el sábado, el domingo y el lunes. Dicha advertencia se transmitió al personal y a quienes se habían refugiado en el hospital.
Respecto a la responsabilidad del hecho, Naoum no entró en detalles porque, según explicó, “las iglesias no somos expertos militares ni periodistas que analizamos los hechos. Como iglesias, estamos unidos contra cualquier forma de violencia contra los civiles, venga de donde venga".
Por último, el arzobispo anglicano invitó a "los líderes mundiales a defender la justicia y la paz, a comprometerse a poner fin al conflicto y a lograr una solución conforme al derecho internacional". Un llamamiento similar lanzó hoy también la Media Luna Roja Palestina (MLRP), que se queja de que "el silencio de la comunidad internacional no hace más que alentar tales acciones y aumentar el riesgo para las vidas de civiles inocentes".
La MLRP también recordó que las evacuaciones ordenadas por Israel a Gaza no son factibles en su totalidad y que representan una sentencia de muerte para los pacientes. Según el servicio de salvamento, las instalaciones y el personal sanitario, así como la población civil, deben ser protegidos de conformidad con el derecho internacional humanitario."+