Pbro. Pedro Javier Torres, obispo auxiliar de Córdoba

  • 16 de noviembre, 2013
  • Buenos Aires (AICA)
El Sumo Pontífice Francisco nombró obispo titular de Castello di Numidia y auxiliar de la arquidiócesis de Córdoba al presbítero licenciado Pedro Javier Torres, de 52 años, miembro del clero de la arquidiócesis de Córdoba, quien en la actualidad se desempeña como párroco de Nuestra Señora del Valle, en el barrio Villa Belgrano de la capital cordobesa, y secretario ejecutivo de la Comisión Episcopal de Ecumenismo, Relaciones con el Judaísmo, el Islam y las Religiones. El anuncio del nombramiento se efectuó simultáneamente en Roma y en Buenos Aires. Aquí lo hizo el nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig, a través de la agencia AICA.
El Sumo Pontífice Francisco nombró obispo titular de Castello di Numidia y auxiliar de la arquidiócesis de Córdoba al presbítero licenciado Pedro Javier Torres, de 52 años, miembro del clero de la arquidiócesis de Córdoba, quien en la actualidad se desempeña como párroco de Nuestra Señora del Valle, en el barrio Villa Belgrano de la capital cordobesa, y secretario ejecutivo de la Comisión Episcopal de Ecumenismo, Relaciones con el Judaísmo, el Islam y las Religiones. El anuncio del nombramiento se efectuó simultáneamente en Roma y en Buenos Aires. Aquí lo hizo el nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig, a través de la agencia AICA. Datos biográficos del nuevo obispo Monseñor Pedro Javier Torres Aliaga nació en Córdoba el 31 de diciembre de 1960. Después de haber completado sus estudios eclesiásticos fue ordenado sacerdote por el cardenal Raúl Francisco Primatesta, arzobispo de Córdoba, el 6 de diciembre de 1984. Tras su ordenación ejerció su ministerio sacerdotal primero como vicario en la parroquia San Juan Bosco y capellán de la capilla María y José del barrio Quebrada de las Rosas, y sucesivamente como párroco en las parroquias de la ciudad de Córdoba: Resurrección del Señor y Nuestra Señora de Pompeya, en el barrio Escobar; Nuestra Señora de Luján y San Fermín, en el barrio Los Paraísos; María Madre del Redentor y de los Santos Juan y Pablo, en el barrio URCA; y desde 2011 hasta la actualidad en Nuestra Señora del Valle, del barrio Villa Belgrano. Fue formador en el Seminario Mayor Nuestra Señora de Loreto y de 1999 a 2001 rector de esa casa de formación sacerdotal. Desde su ordenación sacerdotal hasta la actualidad se desempeña como docente en el Seminario Mayor Nuestra Señora de Loreto, y también es docente en el Seminario Interdiocesano La Encarnación de la arquidiócesis de Resistencia, Chaco. Asimismo presta sus servicios de docente en encuentros sacerdotales y en cursos pastorales. Es también predicador de retiros espirituales en distintas diócesis del país. Desde 2010 es miembro representante de la Iglesia Católica en el Comité Interreligioso por la Paz (Comipaz). Es vocero en los medios de comunicación social en temas referentes a la moral, especialmente a la bioética, el ecumenismo y el diálogo interreligioso. Desde diciembre de 2011 se desempeña como secretario ejecutivo de la Comisión Episcopal de Ecumenismo, Relaciones con el Judaísmo, el Islam y las Religiones. Obispos auxiliares de Córdoba Con este nombramiento la arquidiócesis de Córdoba, que cuenta con una población superior a los dos millones de habitantes, de los cuales se estima que el 90 por ciento son católicos, vuelve a tener obispo auxiliar. Entre los obispos auxiliares de Córdoba en las últimas décadas figuran el actual cardenal Estanislao Esteban Karlic, que luego fue arzobispo de Paraná; monseñor Carlos José Ñáñez, actual arzobispo de Córdoba; monseñor José María Arancibia, luego arzobispo de Mendoza; monseñor Roberto Rodríguez, luego obispo de Villa María y después obispo de La Rioja; monseñor Elmer Osmar Miani, luego obispo de Catamarca; y monseñor José Ángel Rovai, luego obispo de Villa María. Fueron también auxiliares de Córdoba los obispos fallecidos: monseñor Cándido Genaro Rubiolo, luego arzobispo de Mendoza; monseñor Enrique Angelelli, luego obispo de La Rioja; monseñor Alfredo Guillermo Disandro, luego obispo de Villa María; y monseñor Jesús Arturo Roldán, luego obispo de San Rafael.+