El legado papal compartió el desayuno con presas de una cárcel tucumana

  • 18 de junio, 2016
  • San Miguel de Tucumán (AICA)
El legado pontificio al XI Congreso Eucarístico Nacional, cardenal Giovanni Battista Re, visitó hoy la cárcel de mujeres de Banda del Río Salí, donde compartió el desayuno con un grupo de internas, a quienes saludó y luego impartió la bendición en nombre del papa Francisco. Las reclusas compartieron con representante papal sus testimonios de vida y sus vivencias dentro del penal. El purpurado también se reunió con un grupo de niños, a quienes les recordó que ellos son "el porvenir de la Argentina, el futuro, la esperanza de la Argentina. Por eso su presencia aquí es muy importante".
El legado pontificio al XI Congreso Eucarístico Nacional, cardenal Giovanni Battista Re, visitó hoy la cárcel de mujeres de Banda del Río Salí, donde compartió el desayuno con un grupo de internas, a quienes saludó y luego impartió la bendición en nombre del papa Francisco. Numerosas personas esperaron al representante papal fuera del penal, donde fue recibido por el intendente de Banda del Rio Salí, Darío Monteros, quien le entregó al purpurado unos regalos, entre ellos un cuadro hecho en alpaca, para distinguirlo como ciudadano ilustre. El jefe comunal le dio también una réplica de la entrada a esa ciudad tucumana, hecha en hojalata, para que el cardenal se la entregue al entregase al Papa. El cardenal Re se dirigió al comedor donde las mujeres lo esperaban para compartir el desayuno. El acceso fue restringido y solo muy pocas personas pudieron ingresar al penal, entre ellos el intendente, su esposa y el ministro de Seguridad de Tucumán, Regino Amado. Las reclusas compartieron con el cardenal Re sus testimonios de vida y sus vivencias dentro del penal. Al finalizar la visita, el legado papal saludó a los fieles que lo esperaban a la salida para verlo, y los exhortó a participar del Congreso Eucarístico Nacional. "Ustedes son el futuro del país" El cardenal mantuvo también hoy un encuentro con niños de catequesis, colegios, infancia y adolescencia misionera, scouts y de otros movimientos, en la Ciudad Eucarística. Mientras se esperaba la llegada del purpurado, un grupo de jóvenes animó a los niños y luego hizo su ingreso la imagen de la Virgen que fue recibida con vítores y al grito de "mamá María", mientras se reproducían videos. De todos ellos, el más conmovedor un con deseos de los niños para la Patria, entre ellos la unidad y la paz en el país. "Esta es la primera vez de los congresos eucarísticos que participan no sólo los grandes sino también los niños. Ustedes son el porvenir de la Argentina, el futuro, la esperanza de la Argentina. Por eso su presencia aquí es muy importante", destacó el cardenal Re. "Mi corazón se regocija enormemente al ver tantos niños, porque ustedes son el futuro de nuestra Iglesia. Y es una alegría que este sea el primer Congreso donde se haya pensado un espacio para los niños", agregó. El legado papal recordó que "el Papa Francisco ama a los niños y jóvenes de la Argentina y reza por ustedes". Otro momento emotivo fue la adoración del Santísimo, cuando los niños se arrodillaron como muestra de amor y respeto por Jesús. Luego de entonar una canción junto con el Coro del Colegio Padre Etcheverrey Boneo, los niños hicieron adoraron en silencio a Jesús Eucaristía.+ [img]http://www.aica.org/subidas/1867.jpg[/img]