Mons. Martín: "Llegar a la Pascua libres de egoísmos y puros de corazón"

  • 12 de marzo, 2019
  • Rosario (Santa Fe) (AICA)
En el comienzo del tiempo de Cuaresma, el arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Eliseo Martín, envió un mensaje a los fieles, animándolos a vivir estos 40 días, de modo que podamos "llegar a vivir la Pascua libres de egoísmos y puros de corazón".
El arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Eliseo Martín, envió un mensaje a los fieles con motivo del comienzo de la Cuaresma. "Comenzamos a vivir 40 días muy especiales, y recordamos en estos días los 40 años del pueblo de Israel por el desierto, desde que salió de Egipto hacia la tierra prometida. Recordamos los 40 días de Jesús llevado por el Espíritu antes de comenzar su misión pública, donde estuvo ayunando y orando en el desierto en soledad", explicó. El prelado se refirió al sentido que tienen estos días para nosotros: "Lo necesitamos, necesitamos la conversión, necesitamos vivir un cambio en nuestra vida, porque inexorablmente nuestra vida se desvía del buen fin para el cual está hecha", afirmó. "Por eso en este tiempo yo te invito, de un modo especial, a practicar la caridad que nos libera del egoísmo y nos hace poner la mirada en el otro. Necesito también reencontrarme conmigo mismo, porque muchas veces nos disipa, nos dispersamos y no sabemos quiénes somos. Vivimos tan distraídos, tan superficiales, muchas veces tan banales que necesitamos ir al fondo y para eso necesito purificar mi corazón", señaló. En ese sentido, llamó a quitar "todas esas adherencias que se van pegando en el alma, en nuestra psique, y que nos impiden tener un corazón puro. A través del ayuno, que no es sólo de alimentos, sino también de los vicios, poder ir purificando nuestro corazón para así, tener un dominio de nosotros mismos", animó monseñor Martín. "Y finalmente necesitamos volver a Dios, porque sin Él nuestra vida no es vida, y por medio de la oración, como hizo Jesús en el desierto, ese vínculo tan íntimo que Él tenía con Dios Padre, llegar a vivir la Pascua libres de egoísmos, puros de corazón y llenos del Señor, y así también vivir la alegría inmensa de la resurrección, y de ese modo experimentar la comunión fraterna, la plena comunión con Dios, y la comunión con nuestros hermanos, anticipo de la vida eterna, anticipo de la gloria del Cielo". "Te invito, te animo, te quiero transmitir coraje para afrontar este camino. No temas, será un camino de liberación, será un camino realmente que te haga más de Dios, más de los demás, y por lo tanto te podrás reencontrar también con vos mismo", concluyó.+