En el día del catequista "no perdamos de vista al Maestro interior, que es el Espíritu"

  • 21 de agosto, 2019
  • Buenos Aires (AICA)
Con motivo del Día del Catequista, que se celebra el 21 de agosto, el secretario ejecutivo de la Comisión Episcopal de Catequesis, Pastoral y Animación Bíblica de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), presbítero Carlos Paravizzini, destacó la figura de San Pío X, "modelo de catequista", y animó a los que desempeñan esa tarea a "no perder de vista el Maestro interior, que es el Espíritu que sopla".
Con motivo del Día del Catequista, que se celebra el 21 de agosto, el secretario ejecutivo de la Comisión Episcopal de Catequesis, Pastoral y Animación Bíblica de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), presbítero Carlos Paravizzini, brindó una entrevista al programa Caminos de Encuentro, que se emite por Radio María Argentina. El sacerdote destacó la figura de San Pío X, quien "en aquel momento histórico le dio una fuerza y un curso muy grande a la catequesis. Él fue un gran catequista, además de haber escrito ese famoso catecismo mayor, hace más de cien años. Es el modelo de catequista, un santazo de aquellos", consideró. Para un catequista, señaló, San Pío X "es una figura con un corazón inmenso, apasionado por Jesús y por el anuncio del Evangelio y un gran amor por los chicos, para que la catequesis les llegue también a ellos. Y ha marcado una etapa en la Iglesia", sostuvo. Por otra parte, el padre Paravizzini señaló que en todas las diócesis está muy arraigado el día del catequista, y consideró que es un día "para celebrarlo, porque el catequista es una figura extraordinaria en la Iglesia, de una responsabilidad enorme", admitió, resaltando "su compromiso, su alegría, su fidelidad a Jesús". "Están en los momentos más difíciles, hay que estar muy cerca de ellos porque son quienes enfrentan los desafíos, los problemas de las familias, el desconocimiento de Dios. Ellos son los que ponen la cara", destacó. En cuanto a la misión del catequista, recordó las palabras del papa Francisco: "No se trabaja, se es catequista". En ese sentido, expresó: "Yo animaría a los catequistas en los desafíos, los desalientos, las críticas a la Iglesia: les diría que nunca perdamos de vista al Maestro interior, que es el Espíritu que sopla". "Uno no ?hace de?, uno es catequista: está apasionado por Jesús, vive de Jesús, vive de ese Maestro interior que nos enseña todo lo que Jesús dijo. Tenemos que estar muy anclados en Jesús y en el amor a la Iglesia, y desde allí enfrentar los desafíos pero con una profunda serenidad y confianza", animó. "No perdamos el eje", aconsejó, e invitó a "seguir amando a esta Iglesia herida, santa y pecadora".+