Es Santuario la iglesia parroquial del Sagrado Corazón de Jesús

  • 13 de julio, 2020
  • Avellaneda (Buenos Aires) (AICA)
El obispo de Avellaneda-Lanús, Mons. Rubén Frassia, declaró santuario diocesano al templo parroquial del Sagrado Corazón de Jesús de Lanús

En respuesta a una solicitud efectuada por el presbítero Ricardo Montiel, párroco del Sagrado Corazón de Jesús de la localidad de Lanús, el obispo de Avellaneda-Lanús, monseñor Rubén Oscar Frassia, declaró santuario diocesano al templo parroquial del Sagrado Corazón de Jesús, en el marco del centenario de su erección canónica, celebrado el 31 de julio.

El correspondiente decreto, datado el 9 de julio de 2020 y firmado por el obispo Rubén Oscar Frassia y el canciller diocesano, presbítero Julio Alfredo Girbal, considera, entre otras características, que el número de fieles que asiduamente peregrina a la iglesia parroquial del Sagrado Corazón de Jesús en Lanús, la convierte en un privilegiado lugar de asistencia divina, de intercesión y de agradecimiento.

A ello agrega otras características que justifican la declaración de santuario diocesano, como su cercanía a una importante red ferroviaria y de autobuses; su ubicación en medio de un gran centro comercial; su presencia secular en la populosa ciudad de Lanús; el hecho de que el templo permanece abierto en el horario de 8 a 20 todos los días del año incluidos los feriados, permitiendo que a lo largo de la jornada las personas puedan pasar por este espacio de oración y encuentro íntimo con el Señor; el mármol gastado del piso de entrada al templo denota la constante afluencia de devotos, cuya devoción al Sagrado Corazón de Jesús, en su dimensión misericordiosa, representa un lugar teológico donde la fe popular busca refugio en medio de lo ajetreado de la vida.

A todo ello se agrega que, de acuerdo con lo indicado en la legislación canónica, está garantizada la celebración de la Eucaristía todos los días del año, el sacramento de la Reconciliación frecuente y la Adoración Eucarística diaria.

El decreto establece que "la parroquia Sagrado Corazón de Jesús en Lanús sea declarado Santuario Diocesano a partir del 19 de junio de 2020, solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús".

Completando su decreto, monseñor Frassia indica que el santuario como lugar especial de difusión del Evangelio “debe proporcionar a los fieles de manera más abundante los medios de la Salvación, predicando con diligencia la Palabra de Dios y fomentando con esmero la vida litúrgica, principalmente mediante la celebración de la Eucaristía y la Penitencia, y practicando también otras formas aprobadas de piedad popular”.

"El santuario -añadió- también es “por sí mismo un hogar que irradia la luz y el calor de la caridad”, ésta se expresa en manifestaciones concretas, en la acogida y hospitalidad con los peregrinos, en la solidaridad y en el compartir, en la disponibilidad y el servicio a todos los que se acercan, en la ayuda a los más necesitados.

"Que este lugar sea un faro de esperanza y salvación que irradie a todos el amor misericordioso del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo que se prolonga aquí en la cercanía solidaria del Sagrado Corazón de Jesús".

El pensamiento del papa Francisco
Monseñor Frassia concluyó con una cita del discurso que pronunció el papa Francisco a los participantes en el primer encuentro internacional de rectores y colaboradores de santuarios el 29 de noviembre de 2018: “El santuario es ante todo un lugar de oración… los santuarios están llamados a alimentar la oración del peregrino individual en el silencio de su corazón. Con las palabras del corazón, con el silencio, con las fórmulas aprendidas de memoria cuando era un niño, con sus gestos de piedad, cada uno debe ser ayudado a expresar su oración personal. Muchos van al santuario porque necesitan recibir una gracia, y luego regresan para dar gracias por haberla obtenido, a menudo por haber recibido fuerza y paz en la prueba. Esta oración hace que los santuarios sean lugares fecundos, para que la piedad del pueblo sea siempre alimentada y crezca en el conocimiento del amor de Dios.”+