Huracán Hanna descubre escultura de la Virgen de Guadalupe sepultada hace 10 años

  • 3 de agosto, 2020
  • Monterrey (México) (AICA)
La escultura de acero de 12 metros de alto había sido arrancada por el huracán Alex hace 10 años. Ahora emergió a 300 metros y los fieles llevan velas al lugar.

La escultura de la Virgen de Guadalupe que fue arrancada por la corriente del río Santa Catarina en Monterrey, hace 10 años, reapareció a casi 300 metros de su ubicación original al ser desenterrada por las lluvias que dejó la tormenta tropical Hanna a su paso por el norte de México en los últimos días.

El 1 de julio de 2010, la llegada del huracán Alex incrementó la afluencia del cauce y derribó la estatua que medía poco más de 12 metros y registraba un peso de 10 toneladas. Este 30 de julio pasado, tras el hallazgo del monumento, el municipio de Monterrey ordenó su rescate.

Estaba entre rocas, agua, tierra y escombros, a la altura del arzobispado de Monterrey, a más de 200 metros de la avenida Constitución, donde fue ubicada en 1990 para conmemorar la segunda visita del papa san Juan Pablo II a Monterrey. El 10 de mayo de aquel año, el pontífice ofreció una misa en el sitio, ante miles de feligreses, y bendijo la imagen, según comunicó la arquidiócesis de la capital de Nuevo León.

“El rescate de la figura de la Virgen de Guadalupe en el Río Santa Catarina se está realizando con mucho cuidado, nuestros compañeros de Servicios Públicos de Monterrey están trabajando en ello”, declaró Adrián de la Garza, alcalde de Monterrey, quien instruyó recuperar a la “Virgen de Constitución”.

El funcionario determinó la participación de cuadrillas que trabajarán mañana, tarde y noche para desenterrar la escultura metálica, luego de que el nivel del río bajó. Estos empleados han descartado el uso de maquinaria pasada y por el momento laboran con palas para remover piedras, agua y arena. En el lugar trabajan equipos de alrededor de 10 personas.

Unos meses después de que fuera derribada, monseñor Aureliano Tapia, quien diseñó la obra, solicitó una búsqueda a las autoridades municipales. Con ayuda de expertos, encontraron la estructura metálica a unos cuantos metros de donde fue puesta, en el talud norte del río Santa Catarina, pero no lograron recuperarla porque estimaron que estaba enterrada a 6 metros de profundidad y debido a su peso, se haría más complicado el proyecto.

A raíz de ello, un grupo de particulares, junto con miembros de la iglesia católica de Monterrey, decidieron financiar una réplica para sustituir la escultura. Entre ellos estuvieron 10 donadores anónimos y también participó la Secretaría de Comunicaciones y Transportes local. Fue el 12 de diciembre del 2010 cuando instalaron el monumento actual.

Se espera que en los próximos días la imagen original pueda ser rescatada, las autoridades piensan que estas labores tardarán de 3 a 4 días. 

Sobre este suceso, monseñor Rogelio Cabrera López, arzobispo de Monterrey, señaló que, si bien no se atrevería a afirmar que se trata de un milagro, sí representa una señal, con la que Dios le habla de esperanza a la comunidad católica en medio de la calamidad.

“La Virgen de Guadalupe siempre ha estado acompañando a nuestro pueblo en las diversas circunstancias, en los momentos de gozo, de desarrollo, de avance y de éxito; pero también en los momentos difíciles de nuestra historia, como el que hemos vivido con el reciente huracán”.

Monseñor Rogelio Cabrera comentó que desde el momento en que el huracán “Álex” sepultó dicha escultura de 12 metros de altura, se había perdido la posibilidad de recuperarla, ya que su peso es de 10 toneladas y había quedado totalmente enterrada.

“Ahora la escultura quedó más a flor de tierra con el huracán “Hanna”, así que tal vez sea posible recuperarla e instalarla en un lugar conveniente, para lo cual estamos recibiendo diversas propuestas. En el lugar en el que originalmente estaba instalada ya no se puede, ya que hay una nueva imagen que la gente valora mucho como signo de la presencia de Dios”.

Para el arzobispo de Monterrey, lo importante es que los católicos están verdaderamente contentos con el hallazgo, pues la ciudad es muy devota de la Virgen María. 

“Tenemos el privilegio de tener tres basílicas dedicadas a la Virgen: la Basílica de Guadalupe -ubicada muy cerca del río Santa Catarina-, la Basílica de Nuestra Señora del Roble y la Basílica de Nuestra Señora de la Purísima Concepción, lo cual forma un triángulo de devoción muy importante para nuestra ciudad y para la arquidiócesis de Monterrey”.

Por tal razón -señala monseñor Rogelio Cabrera-, el reciente acontecimiento provocado por el huracán “Hanna” dice mucho a la feligresía de Monterrey; “ahora tiene que ser valorado, y seguramente habrá una respuesta mucho más piadosa por parte de la gente: creo que, si bien el pueblo ha estado rezando a la Virgen de Guadalupe durante la pandemia, ahora rezará mucho más”. +