Mons. Scheinig: El peregrinar juntos va marcando nuestra Iglesia

  • 24 de mayo, 2022
  • Luján (Buenos Aires) (AICA)
La comunidad arquidiocesana de Mercedes-Luján peregrinó este domingo 22 de mayo a la basílica y santuario nacional de Nuestra Señora de Luján.

Una gran cantidad de fieles de la arquidiócesis de Mercedes-Luján peregrinó este 22 de mayo a la basílica de Nuestra Señora de Luján para llevar sus oraciones y acción de gracias a la patrona de los argentinos.

A su llegada, fueron recibidos por el arzobispo, monseñor Jorge Eduardo Scheinig, que ofreció unas palabras de bienvenida, y el presbítero Sergio Gómez Tey compartió una reflexión sobre la vida del Negro Manuel y la Virgen de Luján

Luego del almuerzo fraterno, iniciaron la peregrinación hacia el santuario de Luján para rezar a los pies de María y celebrar juntos la Eucaristía, presidida por monseñor Scheinig y concelebrada por sacerdotes de distintas comunidades de la Iglesia arquidiocesana.

La peregrinación se vivió con mucha alegría y contó con la presencia de los jóvenes que participaron del encuentro de prejuveniles.

Monseñor Scheinig dedicó su homilía a recordar que peregrinar es salir al encuentro de Dios, en este caso, a través de un encuentro con la Madre.

El prelado reconoció: “Venimos cargados con el peso de la vida; son muchas las cosas que nos inquietan y nos dan miedo, cosas personales, cosas familiares, las cosas de la patria, las cosas del mundo”.

Y aunque admitió que a veces el peso es mucho, aseguró que “es bueno venir a esta casa de visita y decir con toda confianza, con toda sencillez, a Dios, a la Virgen: ‘la vida me pesa, aliviame; necesito el alivio de Dios’. Sin vergüenza, porque no jugamos a ver quién es más poderoso; somos caminantes, necesitamos del alivio”.

Seguidamente, valoró la presencia de las diversas comunidades de la arquidiócesis como un signo de comunión.

“Hoy, el Señor nos acaba de decir a nosotros, peregrinos, cargados de las cosas de la vida, ‘no se inquieten, no tengan miedo, yo les doy la paz. Crean’. ‘Si ustedes me aman -dice Jesús-; si ustedes creen, mi Padre y yo vendremos y habitaremos en cada uno de ustedes’”, sostuvo.

En ese sentido, invitó a no tener miedo y no inquietarnos, “porque Él quiere habitar en nosotros”.

Escuchar esta Palabra, señaló “nos invita a ser Iglesia que camina junta, Iglesia que peregrina unida. Caminamos juntos, peregrinamos juntos”.

“¡Cuánto podemos aprender para ser una Iglesia sinodal si nos reconocemos peregrinos a este santuario!”, exclamó el arzobispo.

“Este gesto que hacemos como Iglesia, lo queremos hacer también para recordar lo que Jesús nos enseña y  para seguir aprendiendo lo que significa ser Iglesia, qué significa caminar juntos, y cuánto tenemos que aprender. Todos, yo obispo, los pastores, ustedes: laicas, laicos, religiosas, religiosos”, continuó.

“Cuando nos juntamos y somos comunidad de comunidades y venimos peregrinando a esta casa, esto va marcando nuestra Iglesia. Nos marca”, reconoció el prelado. 

“Es muy bello que hoy, como Iglesia, como comunidad de comunidades peregrinas, estemos recibiendo de Dios la paz, la conciencia de que Dios está y somos templo del Espíritu; y ustedes son templos en donde viven. Ustedes son templos porque lo dice Jesús. Jesús habita en ustedes porque lo aman y creen, más allá de la conciencia o no conciencia de pecado que tengamos”.

“Esta es una Iglesia viva por el Espíritu. No por nosotros que somos simples peregrinos. Y en esta Iglesia seguimos recordando y aprendiendo quien es Jesús, quién es la Virgen. Mucho tenemos que aprender y en eso estamos y en eso queremos caminar. Celebremos que somos Iglesia de Mercedes-Luján”, concluyó.

Al final de la Eucaristía, monseñor Scheinig bendijo las imágenes de María de Luján, que las parroquias llevaron en peregrinación hasta la casa de la Madre del pueblo argentino, y que misionarán en las distintas comunidades.+