La diócesis de San Francisco avanza en el camino sinodal

  • 30 de junio, 2022
  • San Francisco (Córdoba) (AICA)
La diócesis de San Francisco presentó un informe de los pasos dados hasta el momento en el camino sinodal.

Mediante un informe titulado "El camino sinodal de la Iglesia diocesana de San Francisco", el equipo del Sínodo dio a conocer los avances en el proceso pastoral que la diócesis comenzó en la década del 90 mediante diversos Planes de Pastoral.

El último de ellos, detallan, fue aprobado para el período 2016-2020, y en medio de este, surgió la idea de ir dando pasos hacia el primer Sínodo diocesano. A partir de allí se conformó un equipo para tal fin, y si bien la pandemia interrumpió el proceso, el equipo pudo consolidarse y profundizar en el concepto de "sinodalidad".

Luego de evaluar el Plan de Pastoral 2016-2020, aparecieron en el horizonte de la vida eclesial la convocatoria a la Asamblea Eclesial de América latina y El Caribe, y al camino sinodal de la Iglesia universal. La prioridad de la diócesis de San Francisco fue entonces continuar con el camino pastoral y sinodal tal como lo venían haciendo.

En ese sentido, el informe detalla los pasos fundamentales que fueron dados por la diócesis, y anticipa la próxima etapa, que se desarrollará durante el tiempo que queda de 2022 y buena parte del 2023: la etapa de escucha.

Informe
El camino sinodal de la Iglesia diocesana de San Francisco

Desde la década del noventa del siglo pasado, nuestra diócesis de San Francisco viene transitando un proceso pastoral cristalizado en diversos Planes de Pastoral. La última versión del Plan de Pastoral fue aprobada para el período 2016-2020. 

Cuando nos acercábamos al tiempo de su evaluación surgió la idea de ir dando pasos para vivir el primer Sínodo diocesano. A tal fin, en 2018, se convocó a un grupo de agentes de pastoral (presbíteros y laicos) para formar un Equipo diocesano que comenzara a estudiar la posibilidad de dar ese paso, estudiando las normas de la Iglesia, los principales datos teológicos pastorales y conociendo las experiencias de otras diócesis que ya han tenido sus Sínodos.

La pandemia interrumpió este proceso, pero nos permitió profundizar mejor, ya no solo la eventual convocatoria de un Sínodo sino el concepto mismo de “sinodalidad”. 

El Equipo diocesano logró consolidarse y empezar a madurar una propuesta de camino sinodal para la diócesis. Vimos claro que lo primordial era consolidar el camino sinodal, dejando para cuando fuera oportuno la celebración del acontecimiento del Sínodo.

Vimos claro que teníamos que concluir con la evaluación del Plan de Pastoral 2016-2020 para cerrar esa etapa de nuestro camino pastoral y, desde esa experiencia, dar el paso hacia el camino sinodal. 

Nos concentramos entonces en la evaluación del Plan de Pastoral 2016-2020. En ese proceso estábamos cuando aparecieron en el horizonte de la vida eclesial la convocatoria a la Asamblea eclesial de América latina y El Caribe y, posteriormente, la propuesta para el camino sinodal de la Iglesia universal. 

El discernimiento que llevamos a cabo y las orientaciones de nuestro obispo nos permitieron ver claro que teníamos que dar prioridad al camino pastoral y sinodal tal como nuestra diócesis lo venía haciendo. Nos alentó a esto que, a medida que íbamos animando en las comunidades de la diócesis la propuesta del camino sinodal, tanto los pastores, las comunidades y otros espacios pastorales mostraban interés y entusiasmo creciente. 

También vimos claro que no íbamos a poder cumplir con los plazos establecidos, sobre todo, para el camino sinodal de la Iglesia universal. 

De todas formas, creemos que el camino que estamos haciendo nos lleva directamente, aunque a nuestro ritmo, por ese camino de la Iglesia bajo la guía del Santo Padre.

Hemos venido dando algunos pasos fundamentales, animados por el Equipo diocesano del Sínodo, a saber:

1. Cerrando el Plan de Pastoral Diocesano 2016-2020 se realizó la evaluación de este a través de dos instrumentos contemplando el aspecto personal y comunitario, trabajados de julio hasta diciembre 2021. Estos pasos fueron fundamentales para conocer el momento que estaba viviendo la Diócesis y con esa base comenzar a proyectar el camino sinodal.

2. Las conclusiones de la Evaluación del Plan de Pastoral fueron compartidas en la Jornada de inicio del año Pastoral 2022 junto a la presentación del Camino Sinodal, el que fue muy bien recibido por sacerdotes y laicos.

3. Comenzamos con la etapa de motivación y concientización, instalando el tema, presentando el logo del sínodo y la oración, se necesita dar a conocer en las comunidades este “caminar juntos”.

4. El Equipo diocesano del Sínodo continúo planificando y proyectando la presentación de instrumentos para transmitir en las comunidades, por lo que se ha convocado a un referente de cada parroquia, movimientos, colegios y organismos. El primer encuentro se realizó en marzo por Zoom. Fue muy importante la respuesta, donde se hizo la presentación del camino sinodal para toda la diócesis, se vivió con mucho entusiasmo. También se reforzó con talleres por decanato.

5. En mayo se realizó el segundo encuentro de referentes para presentar el primer instrumento de trabajo: “Sinodalidad: escucha, diálogo y discernimiento”, cada comunidad lo puede adaptar y lo realizará de acuerdo con sus posibilidades.

6. En julio estamos por presentar el segundo instrumento: “comunión, participación y misión”, con la modalidad. Los instrumentos pueden ser adaptados a la realidad del tiempo y espacio de cada comunidad. Flexibles y fáciles de aplicar para acompañar este camino sinodal

Por lo que se percibe y los comentarios de las comunidades, se está viviendo con entusiasmo y alegría, respetando los tiempos de cada lugar, no podemos desconocer que el período de pandemia ha diezmado la participación de los fieles. El camino sinodal es un acontecimiento del Espíritu que nos convoca y motiva para acercarnos proyectando la Misión. 

Ahora estamos en una etapa de motivación que tiene como finalidad ayudar a nuestras comunidades, agentes y espacios pastorales a asumir con convicción y buena motivación el camino de la diócesis. 

En los próximos meses nos disponemos a iniciar la que consideramos una etapa fundamental: la etapa de escucha. Calculamos que nos llevará lo que resta de este año 2022 y probablemente, buena parte del 2023 próximo.+