Mons. Ojea: 'Encontrarse con Jesucristo produce un cambio radical en la vida'

  • 30 de julio, 2023
  • San Isidro (Buenos Aires) (AICA)
El obispo de San Isidro puso un ejemplo de lo que implica esa búsqueda, e invitó a pedirle al Señor "poder descubrir ese tesoro en el camino de nuestra vida".

El obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, reflexionó sobre el Evangelio dominical, que plantea que “el descubrir a Jesucristo, encontrarse con Jesucristo, produce un cambio radical en la vida”, y destacó: “Uno es capaz de dejar todo cuando encuentra ese tesoro escondido en un campo”.

El prelado propuso un ejemplo –que aseguró que lo conmovió- "para ponderar la importancia de descubrir verdaderamente a Jesús”. 

“Hace muchos años, conocí un muchacho que estaba haciendo enormes esfuerzos para dejar la droga, estaba atrapado por la droga; mientras estaba sumido en este tremendo flagelo, no tenía conciencia de lo que significaba haber tenido un hijo, su hijo era como algo más dentro de su panorama vital, totalmente nublado”, contó. “Cuando comienza a recuperarse, con la fuerza de la comunidad que genera anticuerpos para poder defenderse y al mismo tiempo crear protección para aquellos que están sumidos en ese mal, cuando empieza a recuperarse, se tiene que internar, y allí empieza a valorar que tiene un hijo; la conciencia de ese hijo fue un factor fundamental para que él pudiera iniciar su rehabilitación”, agregó.

Monseñor Ojea reveló que, finalmente, ese joven le pidió que lo bautizara y poder ir al bautismo de su hijo: “Pidió autorización a la gente de donde estaba internado y realizamos el bautismo en la villa 21-24”.

“Fue realmente una ceremonia sumamente emotiva; él había ido solamente por su hijo”, describió, y completó: “Cuando terminamos la ceremonia del bautismo, él me pidió hacer una oración delante del chico porque tenía que irse, no se iba a quedar a la fiesta”.

El obispo sanisidrense relató que, con toda sencillez, el joven se dirigió a su hijo y le dijo: «Vos ahora sos el sentido de mi vida. Yo me estoy curando para vos, me estoy poniendo mejor para vos, quiero ser un buen padre. Sé lo que puedo dejarte como herencia y, en este momento, estoy pensando que el esfuerzo que hago y esta recuperación que estoy haciendo la tengo para vos; por eso te pido que me disculpes por todo el mal que te hice en el tiempo que no te reconocí, y ahora vuelvo al lugar donde estoy internado, para estar de nuevo mejor para vos». 

“A mí me conmovió tanto esa oración que me parece un buen ejemplo de cuando uno descubre una realidad que está totalmente fuera de todos los otros parámetros en los cuales uno desarrolla su vida”, subrayó el prelado.

“Vale la pena dejar todo cuando uno valora ese tesoro que está por encima de todo y que, en el caso de este muchacho, le dio un sentido nuevo a toda su vida. Cuando encontramos a Jesús, cuando descubrimos a Jesús, todo lo demás nos parece nada”, sostuvo.

Tras recordar que san Pablo dice: “Cuando descubrí a Cristo todo lo demás me pareció una basura, me pareció poquito, porque lo bueno estaba en Él verdaderamente”, monseñor Ojea invitó a pedirle al Señor “poder descubrir ese tesoro en el camino de nuestra vida”.

“Ese tesoro se nos muestra de un modo concreto, y así nos va a resultar mucho más simple dejar muchas cosas que nos parecen importantes, urgentes, valiosas, por aquel tesoro escondido, por aquella perla preciosa del Evangelio por la cual vale la pena entregar la propia vida”, concluyó.+