Ante el inicio de clases, el Consudec anima a contagiar paz y esperanza

  • 27 de febrero, 2024
  • Buenos Aires (AICA)
Adrián Álvarez, presidente del Consejo de Educación Católica, recuerda a los docentes su rol fundamental de "sembradores de una cultura del encuentro en cada aula, en cada escuela, en cada comunidad"

En un mensaje con motivo del inicio de las clases, el presidente del Consejo Superior de Educación Católica (Consudec), Adrián Álvarez, afirmó la necesidad de afrontar este desafío “con renovadas esperanzas, convencidos de que es posible, desde nuestro lugar, aportar por la construcción de un mundo mejor”.

“En el medio de la realidad que nos toca vivir, nuestras comunidades no escapan a los obstáculos y dificultades que viven cada una de las familias que las componen, las de nuestros estudiantes y las de nuestros docentes y no docentes”, planteó, y agregó: “En esta incertidumbre, sin embargo, nosotros tenemos la certeza de que el Señor nos acompaña en el camino. Él nos invita a contagiar su paz y su esperanza, seguros de que con su compañía no hay nada que no podamos enfrentar”.

“Frente a una sociedad en la que la confrontación pareciera ser el modo de la relacionarse, en nuestras comunidades queremos comprometernos con la construcción de un diálogo que nos lleve al encuentro y a una paz social duradera, que respeta el disenso, pero prioriza la unidad, diferenciándola de la uniformidad de criterios”.

En este marco, el presidente del Consudec consideró que el papel de los docentes resulta ser fundamental, y precisó que su tarea es “ser constructores de paz social y sembradores de una cultura del encuentro en cada aula, en cada escuela, en cada comunidad”.

Texto del mensaje
En estos días comenzarán las clases en las distintas provincias y en la Ciudad de Buenos Aires. Como todos los años afrontamos el desafío con renovadas esperanzas, convencidos que es posible desde nuestro lugar, aportar por la construcción de un mundo mejor.

En el medio de la realidad que nos toca vivir, nuestras comunidades no escapan a los obstáculos y dificultades que viven cada una de las familias que las componen, las de nuestros estudiantes y las de nuestros docentes y no docentes.

En esta incertidumbre, sin embargo, nosotros tenemos la certeza que el Señor nos acompaña en el camino. Él nos invita a contagiar su paz y su esperanza seguros que con su compañía no hay nada que no podamos enfrentar.

La escuela es espacio de encuentro de todos y para todos, en ella aprendemos desde pequeños a compartir, a respetar, el valor de la palabra y el dialogo por sobre el conflicto.

Frente a una sociedad en la que la confrontación pareciera ser el modo de la relacionarse, en nuestras comunidades queremos comprometernos con la construcción de un diálogo que nos lleve al encuentro y a una paz social duradera, que respeta el disenso, pero prioriza la unidad diferenciándola de la uniformidad de criterios.

En este marco el papel de los docentes resulta ser fundamental: ser constructores de paz social y sembradores de una cultura del encuentro en cada aula, en cada escuela, en cada comunidad.

El Señor nos bendiga y la Virgen nos acompañe en este nuevo ciclo lectivo.

Más información, en www.consudec.org y redes sociales.+