Tucumán: movimientos sociales celebraron su Jubileo guiados por Francisco y León XIV
- 26 de noviembre, 2025
- San Miguel de Tucumán (AICA)
En un encuentro convocado por la Pastoral Social, organizaciones de la economía popular compartieron su trabajo, firmaron un acta común y renovaron su compromiso por la dignidad y la justicia.
Cerca de 50 movimientos sociales de Tucumán participaron, el 20 de noviembre, del Jubileo convocado por la Pastoral Social de la arquidiócesis. La jornada reunió a trabajadores y trabajadoras de la economía popular, emprendimientos comunitarios y diversas organizaciones que, inspiradas por el mensaje del papa Francisco y del papa León XIV, se congregaron para agradecer y renovar su esperanza.
El encuentro contó con la presencia de monseñor Carlos Sánchez, arzobispo de Tucumán; monseñor Roberto Ferrari, obispo auxiliar; y monseñor José María Rossi OP, obispo emérito de Concepción.

Tras recorrer los stands y bendecir a los participantes, monseñor Sánchez alentó a las organizaciones a perseverar, recordando que la Iglesia quiere "caminar junto a Jesús y junto al pueblo que sufre".
Desafíos y sueños
Durante la jornada, representantes de distintos movimientos expresaron sus desafíos y sueños, destacando el valor de la organización comunitaria en un contexto de profunda crisis.
Uno de los momentos centrales fue la firma de un acta-acuerdo que recoge las propuestas y deseos comunes: garantizar tierra, techo y trabajo; fortalecer la economía popular; apoyar a pequeños productores; acompañar a personas en situación de vulnerabilidad; y promover políticas públicas que aseguren derechos básicos y dignidad para todos.

El acta reafirma que los movimientos sociales "nacieron del dolor, de la necesidad y de la esperanza", y que continúan sosteniendo comedores, espacios de cuidado, polos productivos, huertas y cooperativas que brindan oportunidades laborales y comunitarias.
El Jubileo concluyó con presentaciones artísticas de distintos grupos populares, en un clima de celebración y gratitud. Uno de los testimonios más emotivos fue el de Mery Anastasio, del Movimiento de Trabajadores Excluidos, quien habló desde la experiencia del pueblo que se organiza para resistir: "Nos quisieron solos, y nos encontramos; nos quisieron débiles, y nos volvimos comunidad".
La jornada dejó como signo compartido la convicción de que "nadie se salva solo" y que la esperanza se construye desde abajo, en comunidad, con el trabajo cotidiano y la fe que anima a seguir adelante.+