Jueves 28 de marzo de 2024

Fiestas patronales de San Antonio de Padua, en Rosario

  • 15 de junio, 2012
  • Rosario (Santa Fe) (AICA)
El miércoles 13 de junio, la parroquia San Antonio de Padua, del barrio Belgrano, de la ciudad de Rosario, celebró sus fiestas patronales y conmemoró los 780 años de su canonización. La misa, que fue presidida por el arzobispo de Rosario, monseñor José Luis Mollaghan, contó con una gran participación de fieles e instituciones parroquiales. En la homilía, el prelado señaló que para San Antonio "el amor a la Iglesia fue a la vez una pasión, con una actitud filial que se alimentaba con la oración, la Palabra de Dios y la Eucaristía, y renacía cada día con mayor esperanza".
Doná a AICA.org
El miércoles 13 de junio, la parroquia San Antonio de Padua, del barrio Belgrano, de la ciudad de Rosario, celebró sus fiestas patronales y conmemoró los 780 años de su canonización.

La misa, que fue presidida por el arzobispo de Rosario, monseñor José Luis Mollaghan, contó con una gran participación de fieles e instituciones parroquiales, así como también de docentes, alumnos, y familias del colegio parroquial.

En la homilía, el prelado señaló que "el anuncio es consolar a todos los que están afligidos; y cambiar el sufrimiento por el óleo de la alegría; porque el Señor viene a salvarnos".

"San Antonio ?dijo- vivió una vida de profunda fe, caracterizada por la sed y la búsqueda de Dios, por el estudio intenso de su Palabra y de la teología, y por la maduración de su vida interior".

Monseñor Mollaghan relató que para San Antonio "el amor a la Iglesia fue a la vez una pasión, con una actitud filial que se alimentaba con la oración, la Palabra de Dios y la Eucaristía, y renacía cada día con mayor esperanza, a pesar de la experiencia de una realidad difícil de sobrellevar".

"El encuentro con Jesús, queremos vivirlo principalmente en el año de la Fe, al que nos convocó el Papa", señaló el pastor rosarino y llamó a que este sea un año "para reforzar y profundizar la fe a nivel personal y comunitario, para que sea el centro de nuestra vida, con un fuerte deseo de misionar y evangelizar, como nos enseña el Evangelio".

El obispo manifestó la necesidad de que "en la parroquia haya una catequesis que fortalezca desde el bautismo y en cada sacramento la vida de la fe para el encuentro vivo con Jesucristo; que de vigor a la familia cristiana, con particular atención a los padres y a las madres en su papel de primeros educadores de la fe de sus hijos" y añadió que precisamos "una catequesis que ayude a alcanzar una educación más integral; que ilumine los verdaderos principios y valores fundados en la ley natural y en la enseñanza de la Iglesia, sobre todo frente a las tendencias que muy a menudo quieren desfigurar su identidad; y que nos acompañe a lo largo de toda la vida del cristiano".

Como conclusión, el prelado pidió "preparar con entusiasmo este Año de la fe, para que la parroquia y esta Iglesia diocesana crezcan en la vida de fe, y también en la caridad, para alcanzar cada día una relación más fuerte con Cristo". +