Jueves 25 de abril de 2024

Las campanas de Francia repicarán por los cristianos perseguidos

  • 8 de agosto, 2015
  • París (Francia) (AICA)
El próximo 15 de agosto, fiesta de la Asunción de la Virgen María, las campanas de las iglesias de Francia repicarán convocando a todos los fieles a rezar a la Virgen por los cristianos perseguidos. La iniciativa partió de la diócesis de Fréjus-Toulon, donde su obispo, monseñor Dominique Rey, convocó a sus fieles a rezar por esa intención. "No son seres desencarnados", proclamó monseñor Rey: "Se encuentran a pocas horas de avión de aquí, en países devastados. Se llaman Samir, Sobhi, Tony, Petro, Boutros, Adib, Rima, Macha, Lama, Fadia, Rama. Son hombres, mujeres, niños, ancianos. Son rostros donde en ocasiones se lee la angustia, el miedo, la tristeza, la confianza, a veces la alegría y la esperanza. Son sollozos inacabables o carcajadas infantiles. Son seres asesinados física y moralmente. Son seres infinitamente amados por Dios".
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El próximo 15 de agosto, fiesta de la Asunción de la Virgen María, las campanas de las iglesias de Francia repicarán convocando a todos los fieles a rezar a la Virgen por los cristianos perseguidos. La iniciativa partió de la diócesis de Fréjus-Toulon, donde su obispo, monseñor Dominique Rey, convocó a sus fieles a rezar por esa intención.

"No son seres desencarnados", proclamó monseñor Rey: "Se encuentran a pocas horas de avión de aquí, en países devastados. Se llaman Samir, Sobhi, Tony, Petro, Boutros, Adib, Rima, Macha, Lama, Fadia, Rama. Son hombres, mujeres, niños, ancianos. Son rostros donde en ocasiones se lee la angustia, el miedo, la tristeza, la confianza, a veces la alegría y la esperanza. Son sollozos inacabables o carcajadas infantiles. Son seres asesinados física y moralmente. Son seres infinitamente amados por Dios".

"Bastaría un signo, una llamada firme a todos los hombres de buena voluntad", pidió el prelado: "Que el día de la Asunción, en Francia, las campanas de todas nuestras iglesias repiquen y los cristianos y todos los que lo deseen se congreguen para expresar su apoyo. Por la Paz, con el único arma del amor en las manos. Unos minutos de recogimiento y silencio".

Poco a poco se fueron sumando otras diócesis a la iniciativa, entre ellas la de Avignon, cuyo obispo, monseñor Jean-Pierre Cattenoz, comentó: "Es importante no bajar los brazos. Hacer tañer las campanas es una hermosa forma de dar testimonio de lo que se vive en las iglesias. Así que invitamos a los cristianos, pero también a todas las personas de buena voluntad, a concentrarse en la calle con ese motivo".

Y "¿por qué el día de la Asunción?", se interrogó monseñor Cattenoz: "Cuando todo va mal, cuando no se tiene nada, uno se vuelve hacia la Virgen María. Dos mil millones de hombres sobre la tierra le rezan, no sólo los cristianos. Propongo a todos los fieles que se concentren en las iglesias a que digan juntos la oración a María que derriba los muros".

Esta oración dice así:

"Santísima Madre de Dios, nos dirigimos a ti como Madre de la Iglesia, madre de todos los cristianos que sufren y de todas las minorías perseguidas. Te suplicamos, por tu ardiente intercesión, que hagas caer ese muro, los muros de nuestros corazones, y los muros que producen odio, violencia, miedo e indiferencia, entre los hombres y entre los pueblos.

"Tú, que mediante tu Fiat aplastaste a la serpiente antigua, congréganos y únenos bajo tu manto virginal, protégenos de todo mal, y abre para siempre en nuestras vidas la puerta de la esperanza.

"Haz que nazca en nosotros y en este mundo la civilización del amor que pende de la cruz y de la resurrección de tu Divino Hijo, Jesucristo, Nuestro Salvador, que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén".

"Tal vez", concluye monseñor Cattenoz, "algunos teman que este gesto sea considerado como una provocación hacia los musulmanes o un atentado a la laicidad. Pero no es nada de eso: se trata de un gesto de oración, de solidaridad, de paz y de fe. Creemos que puede tener un auténtico impacto".+