Mons. Han Lim Moon: "¡Hoy el cielo baja a tu corazón!"

En su homilía para el quinto domingo de Pascua, monseñor Han Lim Moon, obispo auxiliar de San Martín, reflexionó con el Evangelio según San Juan.

En su homilía para el quinto domingo de Pascua, monseñor Han Lim Moon, obispo auxiliar de San Martín, reflexionó con el Evangelio según San Juan y explicó a qué se refiere Jesús cuando dice “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida”.



“Normalmente entendemos por la palabra verdad la realidad sin mentiras, algo inmutable. Pero Jesús dice: ‘Yo soy la verdad’, es decir, aquí se trata de que su persona es la Verdad hecha hombre”, comenzó diciendo el prelado. Pero se preguntó: “¿Cómo la verdad puede convertirse en un hombre?”, y aseguró: “Porque Dios Padre quiso enviarnos su Palabra reveladora, su Hijo hecho hombre, Jesús”.



“Dios nos ama tanto que nos hace sus hijos verdaderos a través de nuestra fe en su Hijo Jesucristo”, afirmó luego. Entonces explicó que con esta verdad revelada “descubrimos la dimensión sobrenatural de nuestro origen, identidad y meta”. Pero para saber que somos “verdaderos hijos”, Dios nos regaló su Espíritu, “el Espíritu del Hijo, en nuestro corazón, quien nos hace clamar a Dios ‘Papá’” .



Sucede, explicó el obispo auxiliar de San Martín, que “aunque Dios reveló esta verdad tan importante hace ya 2000 años, hay muchas personas que todavía no toman conciencia ni la han incorporado en su vida”. Al descubrir esa verdad en nuestras vidas, “Él abre el camino de amor por nosotros a través de su pasión, muerte, resurrección y ascensión. Jesús nos invita, como hijos de Dios, a transitar con nuestros esfuerzos por, con y en Él, Camino Viviente, para llegar a la ‘mansión del Padre’”.

Cuando Jesús dice “Yo soy la Vida” significa “que Él, siendo el autor de toda la creación y vida, nos introduce a la plena comunión en la vida divina de la Santísima Trinidad. Por eso, el deseo ardiente de Jesús y del Padre es vivir eternamente junto a nosotros, en su mansión, en el amor del Espíritu Santo, con la Virgen María, todos los santos y nuestros seres queridos”, sostuvo.



Monseñor Han Lim Moon indicó que “para vivir en su mansión es necesario principalmente ‘creer’ y ‘caminar’, según dos expresiones de Jesús”: la primera, “crean en Dios y también crean en mí…”, “con estas palabras Jesús te está pidiendo por favor que le creas plenamente, al menos por sus obras, Él garantiza que no te miente”.

La segunda, “Yo soy el Camino, nadie va al Padre, sino por mí”, es decir, “te está pidiendo transitar por el camino de amor que es Él mismo ¡y no hay otro!”. Por eso, invitó a la comunidad que está transitando este camino a renovar la esperanza porque “mi Padre lo amará; iremos a él y habitaremos en Él (…) ¡Hoy el cielo baja a tu corazón!”+