Sábado 20 de abril de 2024

Mons. Lozano animó a renovar la dimensión peregrina de la fe

  • 1 de octubre, 2017
  • San Juan
"Renovemos la dimensión peregrina de la fe. Pensemos si estamos ´instalados´ en la comodidad o aburguesados en la fe. Vamos a andar la fe", pidió el arzobispo de San Juan de Cuyo, monseñor Jorge Eduardo Lozano, al reflexionar sobre el significado profundo de la peregrinación juvenil al santuario nacional de la Virgen de Luján de este fin de semana. "En María nos reconocemos hermanos. Ella es la Madre que cobija a los desamparados, consuela a los tristes, escucha a los despreciados, alienta en la esperanza. Ella es la Reina de la paz", subrayó.
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"Tener fe en Dios es mucho más que creer. A veces decimos que la fe consiste en creer en Dios. Y esto es cierto. Pero me animo a decir que es mucho más que eso. Incluso algunos explican ese ´creer´ como el afirmar verdades tan ciertas como abstractas. Las diversas tradiciones judeo-cristianas nos muestran que creer es ponerse en camino", destacó el arzobispo de San Juan de Cuyo, monseñor Jorge Lozano.

El prelado hizo esa introducción al destacar que este fin de semana se está desarrollando la Peregrinación Juvenil al santuario de la Virgen de Luján, en la que "cientos de miles de jóvenes de diversos lugares del país (también han viajado unos cuantos de San Juan) caminando dan testimonio de su fe".

"De los fieles que van caminando, cerca del 20% pertenecen a grupos parroquiales o de instituciones católicas. El otro 80% está compuesto por grupos de amigos, compañeros de trabajo, familiares que sienten un llamado a ponerse en camino. La Virgen es la que convoca más allá de las estructuras orgánicas de la Iglesia y sus organizaciones, que se ponen al servicio de la totalidad", aseguró.

Al referirse al lema "Madre, enséñanos a construir la paz", consideró que "esta oración por momentos sale de un corazón sereno, pero también surge de la angustia de la violencia en la calle, la escuela, la cancha, la sociedad en general".

Tras indicar que "en la entrada de la basílica de Luján hay varios cuadernos en los cuales los peregrinos escriben sus intenciones y necesidades", recordó que "el lema se formula mediante una lectura atenta de esas peticiones confiadas al corazón de la Madre".

"Hace unos años los obispos argentinos señalamos que ´la sociedad está enferma de violencia´. Necesitamos paz que se traduce en armonía, diálogo, amistad, unión. La pobreza es violencia, la inequidad es una agresión al hermano", advirtió.

"La paz es un don de Dios y por eso la pedimos. Pero también se requiere de nuestro compromiso en la búsqueda del bien común y del respeto de la dignidad de todos, de cada persona, de cada creatura, parte del proyecto del amor de Dios. El maltrato a la creación de Dios es una manera de darle la espalda al Creador", precisó.

Monseñor Lozano señaló que "en María nos reconocemos hermanos. Ella es la Madre que cobija a los desamparados, consuela a los tristes, escucha a los despreciados, alienta en la esperanza. Ella es la Reina de la paz".

"Muchos no vamos a ir a Luján caminando. Pero todos podemos unirnos espiritualmente, en casa o en el templo, y rezar ´Madre, enséñanos a construir la paz´", animó parafraseando el lema de la manifestación de fe.

"Renovemos también la dimensión peregrina de la fe. Pensemos si estamos ´instalados´ en la comodidad o aburguesados en la fe. Vamos a andar la fe", concluyó.+

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