Viernes 29 de marzo de 2024

Mons. Torrado Mosconi instó a afrontar la pospandemia sin descartar a nadie

  • 11 de mayo, 2020
  • Nueve de Julio (Buenos Aires) (AICA)
El obispo de Nueve de Julio, monseñor Ariel Torrado Mosconi, llamó a recomponer el tejido social resquebrajado por la crisis del coronavirus, "sin tira afuera a los que aparentemente 'sobran'".
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El obispo de Nueve de Julio, monseñor Ariel Torrado Mosconi, llamó a reomponer el tejido social resquebrajado por la crisis del coronavirus, evitando ceder a la tentación del egoísmo que descarta, suprime y tira afuera a los que aparentemente “sobran”: los pobres, los ancianos, los niños por nacer, los privados de la libertad, los enfermos terminales.



El prelado hizo este llamado al presidir el 8 de mayo la misa por la Virgen de Luján, en la capilla dedicada a la patrona nacional en el barrio homónimo de la ciudad de Nueve de Julio, sin fieles y transmitida por medios digitales y redes sociales.



“En su fiesta, María de Luján nos recuerda que somos parte, como Iglesia y como nación, de una misma familia: hijos de un Padre Dios y de una Madre, María, figura de la Iglesia. Y, por eso mismo, hermanos entre nosotros. Unidos en familia podremos afrontar y superar esta inédita difícil coyuntura histórica”, sostuvo.



El prelado consideró que para superar las consecuencias graves que provocó la pandemia será necesario afrontarla desde una espiritualidad que anime y motive, así como desde una convivencia fraternal y solidaria.



“No debemos ni podemos ceder a la tentación del egoísmo que descarta, suprime y tira afuera a quienes aparentemente ‘sobran’. Sería caer en una lógica autodestructiva que, tarde o temprano, termina también por alcanzarnos a todos incluyendo a quien la sostiene, propugna y provoca”, advirtió.




No debemos ni podemos ceder a la tentación del egoísmo que descarta, suprime y tira afuera a quienes aparentemente ‘sobran’. Sería caer en una lógica autodestructiva que, tarde o temprano, termina también por alcanzarnos a todos incluyendo a quien la sostiene, propugna y provoca.



“Es una dinámica perversa que nos ‘autodevora’. ¡Tengámoslo claro! El esfuerzo por buscar, alcanzar y preservar el bien común, conjugando generosidad y sacrificio, es indudablemente un reflejo y eco de la más genuina y mejor caridad cristiana”, aseveró.+