Quinto día de la Novena: Mons. Colombo llamó a confiar en la mano protectora de María

El arzobispo de Mendoza rezó especialmente por las víctimas del coronavirus

El arzobispo de Mendoza, monseñor Marcelo Colombo, guió la meditación correspondiente al quinto día de la novena dedicada a Nuestra Señora de Luján. “Mi corazón, mi mente vuelan desde Mendoza a la casa de la Virgen, en el santuario nacional de Luján, donde tantas veces nos hemos encontrado los argentinos, los cristianos en general para pedirle a nuestra Madre una gracia, para saber decirle: Madre, aquí estamos, esta es nuestra vida, te necesitamos”, afirmó.



“En esta ocasión, en este día, rezamos por las víctimas del coronavirus, tantas personas que han fallecido en el mundo, en distintas regiones, un número también importante de víctimas mortales aquí, en la Argentina”.



“También pensamos en los infectados, en las personas que se han visto afectadas de un modo u otro por esta pandemia. Nuestro corazón solidario se une al de sus familias y al de la humanidad entera, suplica a Dios que haga pasar este cáliz amargo de la humanidad”, rezó.

“La Madre, la buena Madre que tenemos, que es la Virgen, sabe escuchar nuestro corazón, como en Caná, como al pie de la cruz, como en Pentecostés, María está al lado nuestro, para ponernos su manto y su mano protectora, y a ella le pedimos entonces que interceda ante el Padre, que pida por nosotros al Padre”.



“En la fiesta de la Virgen de Luján, cada argentino está invitado a sentirse hermano de sus paisanos, de cada miembro de este pueblo argentino, y en ese sentido de fraternidad que tanto todavía nos cuesta vivir en la práctica, el Señor nos hará encontrar el sendero de la unidad y las posibilidades de salir de esta todos juntos, como dice el Papa: tenemos que ser capaces de reconocernos parte de la misma barca, y en nuestra barca está Pedro, está Jesús y está María, nuestra Madre de Luján. A ella le pedimos entonces: Nuestra Señora de Luján, ruega por nosotros”.+