Jueves 2 de mayo de 2024

La diócesis de Mar del Plata se prepara para celebrar la 50ª Marcha de la Esperanza

  • 16 de noviembre, 2023
  • Mar del Plata (Buenos Aires) (AICA)
La caminata, que estará acompañada por el lema "Con María, misioneros de la Esperanza", se llevará a cabo el sábado 2 de diciembre a las 16. La jornada culminará con una misa en la catedral local.
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La diócesis de Mar del Plata realizará, el sábado 2 de diciembre a las 16, la tradicional Marcha de la Esperanza, una de las expresiones de fe y piedad popular más grandes en esa jurisdicción eclesiástica, que este año celebrará los 50 años de su implementación por el entonces obispo local, monseñor Eduardo Pironio.

Participarán de la caminata -que partirá de la gruta de Lourdes hacia la Catedral de los Santos Pedro y Cecilia- vecinos, diversas comunidades parroquiales, colegios e instituciones católicas de la ciudad, como un signo de esperanza y expresión de amor a María por parte de la comunidad marplatense.

La marcha podrá seguirse mediante la transmisión radial en FM 105.1 y 92.1 Radio María, y a través de las redes sociales del obispado. 

Los caminantes pasarán por las parroquias San Antonio, Jesús Obrero, San José y Asunción de la Virgen -ubicada en el Hospital Materno Infantil- y finalizará en la catedral local, con la celebración de la Eucaristía.

“La Marcha de la Esperanza es una tradicional expresión de fe popular, alegre y festiva, la cual, llegando a fin de año y al tiempo de Adviento, nos prepara para celebrar la Navidad; por eso asumimos el desafío de peregrinar juntos, como lo tenemos que hacer en la vida misma”, señalaron desde la diócesis.

Medio siglo caminando con María por las calles de la ciudad
La Marcha de la Esperanza se hizo por primera vez el 8 de diciembre de 1973, como una iniciativa de la comunidad juvenil que quería encarnar la religiosidad popular, caminando con María desde el puerto, pasando por algunos de los barrios periféricos, hacia el centro de la ciudad.

Entre los caminantes que participaron de la primera marcha se encontraba Daniel Dibartolo, quien recordó recientemente: “A los 18 años, participé de la primera Marcha de la Esperanza en Mar del Plata. Nos acompañó en toda su preparación nuestro obispo de ese momento, el querido Eduardo Pironio”.

Por su parte, Osvaldo Estorch, destacó: “La Marcha de la Esperanza nació como una expresión de la comunidad juvenil, que conducía, se comprometía, gestionaba y que tenía una mirada de la pastoral popular que quería encarnar la religiosidad popular”.

En tanto, Dora Cardonet, manifestó: “De la primera marcha recuerdo, con mucha emoción, a la gente de los barrios, que venían con sus imágenes, que sacaban de la capilla, y las traían en andas y nos congregábamos en la gruta de Lourdes, para hacer la marcha con María de la Esperanza”.

Por su parte, Roberto Benzo, expresó: “En cuanto al sentido de las antorchas, al momento de llegar a Colón y Santa Fe, en cada atardecer era el hecho de poder mostrar a todo el centro de Mar del Plata que esa era la luz de Cristo, y que nosotros estábamos dispuestos a hacerla brillar”.

Una marcha como signo de esperanza y anuncio del Evangelio
El administrador diocesano de Mar del Plata, presbítero Luis Albóniga, dialogó con AICA y extendió la invitación a los marplatenses que deseen participar de esta expresión de fe, que es “muy significativa; la tomamos precisamente porque fue el cardenal Eduardo Pironio quien nos la inspiró, el cual tuvo mucho que ver con la primera realización de la Marcha de la Esperanza”.

El sacerdote aclaró que, si bien esta marcha “se da en un tiempo tal vez distinto al que le tocó a él para pastorear la diócesis, el desafío en común de tener que anunciar con fuerza el Evangelio y de llevar la esperanza a los hermanos sigue latente”. 

“Hemos querido recuperar esta expresión de quien fuera nuestro obispo, para poder animar en la esperanza a nuestro pueblo, y la esperanza se anima en la medida en que nos ponemos a caminar; no se anima si nos encerramos en nosotros mismos o si la Iglesia se vuelve sobre sí misma, sino cuando la Iglesia descubre la gran riqueza que es Cristo, presente entre nosotros, que quiere salir al encuentro de los hermanos”, agregó Albóniga.

Por eso, dijo que “en esta peregrinación, esta marcha que comienza en la gruta de Lourdes, un lugar por excelencia mariano en la ciudad de Mar del Plata y de gran devoción a la Virgen, caminamos pasando por distintas comunidades hasta la Iglesia catedral. Aquí hay otro aspecto significativo, porque la sede está vacante, y entonces nuestro caminar es en esperanza y disponiendo nuestro corazón para recibir al pastor que Dios quiera regalarnos”.

Finalmente, señaló que “esta marcha es tan significativa también porque acompañaremos mediante ella el proceso de beatificación del cardenal Pironio”.+