El arzobispo sanjuanino reflexionó sobre el pasaje evangélico de la mujer adultera y destacó la actitud de Jesús que, frente a una vida rota, intentó sanarla y no romperla aún más.
El arzobispo de Bahía Blanca hizo un llamado a no dejarse vencer por el odio y a buscar siempre la reconciliación y la paz, evocando las palabras de Juan Pablo II en su última visita a la Argentina.
"La Iglesia ha sido creada por Cristo para que el mundo reciba la Palabra y arregle su vida conforme a ella", recordó el arzobispo emérito de Corrientes en su sugerencia para la homilía.
El arzobispo de Bahía Blanca planteó que la reconciliación es el camino, y el amor de Dios, siempre inmenso y desbordante, es la única medida posible para caminar hacia la verdadera paz.