El obispo de Formosa les pide que con creatividad y compromisos propios contribuyan al triple objetivo de ese camino eclesial: comunión, participación y misión.
El obispo de Posadas sostuvo: "Esto nos permite madurar la identidad cristiana para que, en medio de las luces y sombras de nuestro tiempo, podamos ser constructores de los valores que profesamos".
El arzobispo de Córdoba recordó que una cosa es experimentarlo y otra consentirlo. "Esto no lo podemos permitir", porque consentirlo "es instalarlo en el corazón y empezar a vivir del desencanto".
"La paz, que es un don de Dios, también es una tarea nuestra", recordó el arzobispo de Mercedes-Luján durante una misa por esta intención en la basílica de Luján.