Siguen las muestras de solidaridad en todo el continente con la Iglesia de Nicaragua ante el constante hostigamiento que viene sufriendo por parte de las autoridades gubernamentales.
La policía antimotines obligó a Mons. Rolando Álvarez a quedarse en la curia. El prelado reaccionó cantando, bendiciendo a los efectivos y exhibiendo el Santísimo, para pedir el cese de la represión.
El asedio del régimen de Daniel Ortega contra la Iglesia continúa en Nicaragua. La policía apresó al padre Leonardo Urbina, ante una denuncia en su contra de "una supuesta violación".
"Tantos hermanos nuestros ya no tendrán las atenciones que recibían de las hermanas", dijo el arzobispo de Managua en una nota lamentando la partida de las religiosas y agradece sus años de servicio.