Con motivo de la inauguración del año judicial, el pontífice recordó el espíritu que impregnó la reforma del procedimiento de declaración de nulidad del matrimonio.
                        El Papa se dirigió a los participantes de un curso de formación organizado por la Rota Romana, y los animó a comprometerse también en el campo de la paz.
                        Francisco les pidió menos rigorismo y prejuicios a los auditores del Tribunal de la Rota Romana. Recordó también que la reforma pretende favorecer los juicios rápidos y no la nulidad de las uniones.
                        El pontífice recibió a los participantes de un curso promovido por la Rota Romana y habló de la importancia de que abogados y jueces trabajen en sinergia con la pastoral familiar