Con gran dolor, el pontífice recibió la noticia de los ataques a los centros médicos de Kiev y a una escuela en Gaza, y espera y reza por el fin a las guerras.
El Patriarcado Latino de Jerusalén denunció los ataques contra civiles en la guerra entre Israel y Hamás, tras el ataque israelí a la escuela Sagrada Familia, en la ciudad de Gaza.
En un documento, la Comisión Justicia y Paz de Tierra Santa cuestiona y se opone al uso indebido de esa expresión, utilizada cada vez más "como arma para justificar la violencia en curso en Gaza".
"El momento es muy doloroso, estamos viviendo una noche muy larga. Pero también sabemos que las noches terminan", comentó el cardenal Pierbattista Pizzaballa, de paso por Roma.