Domingo 28 de abril de 2024

Mons. Lugones y el camino sinodal: "Mayor comunión, participación y misión"

  • 19 de octubre, 2021
  • Lomas de Zamora (Buenos Aires) (AICA)
"El proceso sinodal es para nosotros una invitación a caminar juntos, a viajar juntos, a confiar juntos", subrayó el obispo de Lomas de Zamora en la misa de apertura diocesana del Sínodo.
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En la catedral Nuestra Señora de la Paz, la diócesis de Lomas de Zamora inició el domingo 17 de octubre el Sínodo de la Sinodalidad, convocado por el papa Francisco, con una misa presidida por el obispo local, monseñor Jorge Lugones SJ.

En comunión con todas las Iglesias particulares del mundo, la diócesis comenzó así el camino sinodal (2021-2023), que tiene por lema: “Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión”.

La misa de inicio de este proceso fue concelebrada por el obispo auxiliar, monseñor Ignacio Medina; el vicario general, vicario zonal de Lomas de Zamora y párroco de la catedral, presbítero Hugo Barrios; los vicarios zonales, presbítero Javier Juárez (Almirante Brown), presbitero Víctor Favero (La Ribera) y presbitero Carlos Ramos (Esteban Echeverría-Ezeiza), y el presbitero Daniel Martín, delegado de la Comisión de Liturgia.  

En su homilía, monseñor Lugones señaló que “el proceso sinodal es para nosotros una invitación a caminar juntos, a viajar juntos, a confiar juntos”.

El prelado lomense explicó que la palabra griega “sínodos”, significa “caminar juntos”, y puntualizó: “Hacer sínodo significa caminar juntos en la misma dirección. Es un andar desde la realidad de nuestra vida con ansiedades y apuros, o de parsimonia y estancamiento en medio de avenidas llenas de publicidad que distraen, de luces que encandilan, más el miedo de avanzar en una superficie inestable y una realidad complicada. Porque andamos atrapados por la ansiedad y el apuro, pasamos sin ver, oímos sin escuchar, miramos sin contemplar al Cristo hermano en el camino”.

Tras llamar a "no pasar de largo" este tiempo, planteó: “Deseamos desarrollar durante el proceso sinodal, en este ´tiempo de Dios´, esta capacidad de amar a Jesús, de amar a la Iglesia”.

En línea con el discurso de la semana pasada del papa Francisco en el momento de reflexión por el comienzo del camino sinodal, monseñor Lugones subrayó los conceptos de comunión, participación y misión, tres claves para la sinodalidad de la diócesis: “Todos estamos llamados a participar en la vida y misión de la Iglesia. Si falta una participación real de todo el Pueblo de Dios, los discursos sobre la comunión corren el riesgo de permanecer como intenciones piadosas. Hemos avanzado en este aspecto, pero todavía nos cuesta, y nos vemos obligados a constatar el malestar y el sufrimiento de numerosos agentes pastorales, de los organismos de participación de las diócesis y las parroquias, y de las mujeres, que a menudo siguen quedando al margen. ¡La participación de todos es un compromiso eclesial irrenunciable!”.

Con la apertura diocesana comienza una etapa de reflexión, escucha y consulta (octubre 2021-abril 2022), y luego de ella vendrá un momento fundamental, la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, en octubre del 2023, a la que seguirá la fase de actuación, que implicará nuevamente la devolución a las Iglesias particulares.

A partir del 20 de noviembre, anunció el obispo, se harán los encuentros por vicarias, cada sábado, con los Consejos Pastorales de las parroquias para ir haciendo el camino sinodal. El Consejo de Pastoral diocesano enviará con antelación el material para la reflexión y el trabajo correspondiente.

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