Sábado 7 de diciembre de 2024

Trasladaron los restos de Mons. Cardelli al santuario de San Nicolás

  • 8 de noviembre, 2024
  • San Nicolás (Buenos Aires) (AICA)
El arzobispo de Rosario, monseñor Martín, presidió la misa en que se cumplió el último deseo del obispo, fallecido hace dos años. En su homilía, monseñor Santiago recordó su "amistad evangélica".
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A casi dos años de la muerte de quien fuer obispo de San Nicolás de los Arroyos, los restos de monseñor Héctor Cardelli fueron trasladados este jueves desde el cementerio local al santuario de María del Rosario de San Nicolás, en cumplimiento de su último deseo: "Estar junto a María".

La ceremonia y la misa de exequias fueron presididas por el arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Martín, y concelebrada por el obispo local, monseñor Hugo Santiago, por monseñor Ernesto Fernández, obispo auxiliar de Rosario, y por más de 30 sacerdotes.

A la emotiva celebración acudieron personas de diversas comunidades, entre ellas, algunas procedentes de María Madre de la Iglesia (de la diócesis de Concordia), vírgenes consagradas, religiosas de diversas congregaciones asentadas en San Nicolás y grupos parroquiales de Villa Constitución.

En su homilía, monseñor Santiago subrayó, en relación con el obispo fallecido, "sobre todo, el amor a la Virgen del Rosario de San Nicolás, lugar que seleccionó para descansar. Lo lindo de este monseñor fue lo simple y humano. Hoy, está al lado del Señor y le pedimos que siga interviniendo por sus amigos y la diócesis".

"En una sociedad tan fragmentada, con tantas grietas, haber podido ser amigos es muy importante para mí, es la gloria mayor que puedo tener", añadió. A su vez, recordó diversas anécdotas con el entonces obispo emérito de San Nicolás, y destacó: "Era un hombre de mucha devoción, muy afectivo".

Y añadió: "Entonces, en síntesis, quería decirles que lo lindo de monseñor Eduardo es esto, así de simple, así de humano: decir que pudimos ser amigos. Y así de evangélico. Esto hay que decirlo, hay que contarlo. Yo creo que es muy edificante para la Iglesia, cuando dos sacerdotes pueden ser amigos, cuando dos obispos pueden ser amigos. Lo importante es esto: haber dado testimonio de la amistad evangélica", reflexionó.


Trayectoria y último deseo
"El último deseo de monseñor Cardelli era descansar junto a la Virgen", subrayó Ana Pose, vocera de prensa del Obispado de San Nicolás, en declaraciones a Radio U, y señaló que la actividad de este jueves marca un hito, ya que es el primer obispo y sacerdote cuyos restos reposan en ese templo mariano.

Monseñor Cardelli fue obispo de San Nicolás de los Arroyos desde 2004 hasta 2016, período en el que consolidó su vínculo con la Virgen del Rosario y con la comunidad.

Había nacido en Godoy (provincia de Santa Fe), el 30 de agosto de 1941. Fue ordenado sacerdote el 21 de septiembre de 1968 en Rosario por el entonces arzobispo monseñor Guillermo Bolatti. Fue párroco desde 1976 de la parroquia María Madre de la Iglesia, situada en el barrio Matheu de esa ciudad, en la cual impulsó con vigor el desarrollo de su escuela y fue además el fundador de la Pastoral Familiar en la misma comunidad.

Fue elegido obispo titular de Fornos Maggiore y auxiliar de Rosario el 15 de mayo de 1995 por san Juan Pablo II; y ordenado obispo el 14 de julio de 1995 por monseñor Eduardo Mirás, arzobispo de ese territorio (los coconsagrantes fueron monseñor Mario Maulión, obispo de San Nicolás de los Arroyos y monseñor Jorge López, arzobispo emérito de Rosario). Se lo trasladó a la diócesis de Concordia el 2 de mayo de 1998, sede de la cual tomó posesión el 4 de julio del mismo año.

El 21 de febrero de 2004, se lo nombró obispo de San Nicolás de los Arroyos, y tomó posesión de esta sede el 1º de mayo de 2004, fecha en que inició su ministerio pastoral como su séptimo obispo de esa diócesis, a la cual renunció por razones de edad en 2016.

Monseñor Cardelli falleció el 7 de noviembre de 2022.


Los mensajes
En diciembre de 2014, siendo aún obispo, Cardelli informó la publicación de los mensajes privados que María del Rosario de San Nicolás le había ido transmitiendo a Gladys Quiroga de Motta.

"Pongo los mensajes al alcance de todos aquellos que desean nutrirse espiritualmente de los mismos", manifestó entonces el obispo a través de un comunicado, en el que destacaba el "lenguaje sencillo" y "adaptado al hombre de hoy" de los textos. Para monseñor Cardelli, las revelaciones privadas de la Virgen a Gladys eran "consejos maternales que nos dirige como a hijos suyos", ayudándonos "a no perder el sentido sobrenatural de la vida y orientándonos según las enseñanzas de Jesús".

En 2017, el actual obispo Santiago, por su parte, dispuso "poner fin, de manera definitiva, a la difusión de los mensajes de la señora Gladys de Motta referidos a la Virgen María", tras hacer una consulta a Roma sobre ese tema. "Lo que consulté a Roma fue hacer definitiva la decisión que tomó monseñor Salvador Castagna en 1990, es decir, dejar de publicar los mensajes, para que el acontecimiento mariano de San Nicolás siga siendo digno de fe y nos lleve a seguir a Cristo a través del Año Litúrgico, el cual nos presenta toda la vida de Cristo y María y es el lugar que la Iglesia nos propone para crecer en la fe católica", fundamentó el prelado, en un video difundido en su momento de manera oficial.+

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