Fue del 28 al 31 de agosto en la localidad cordobesa de San Antonio de Arredondo. El objetivo fue dialogar sobre los santuarios como espacios de esperanza.
Son organizados por el equipo de "No más chicos descartables". Participación de referentes sociales, religiosos y comunitarios. Uno es en la Casa Mama Antula y el otro, en la parroquia Cristo Obrero.
Participaron más de 130 de diversas diócesis del país. Con el lema "Cada vocación, un signo de esperanza", reflexionaron sobre diversos aspectos vinculados a la vocación de servicio.
Serán el 6 y el 20 de septiembre en el centro asistencial porteño. Están dirigidas a agentes pastorales del área. La misa jubilar será presidida por el arzobispo Jorge García Cuerva.