"Matar de hambre a una población es profanar la vida. Guardar silencio es ser cómplice", señaló el organismo, condenando la hambruna provocada por el hombre en Gaza.
"Se acabó el tiempo", advierten desde la OMS, Cáritas Internacional, la ONU y más de 100 organizaciones, sobre la "hambruna masiva" que provoca el cerco israelí sobre la región.
El arzobispo mayor de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana, denunció que hay "cinco millones" de ucranianos al borde de la inanición y esta tragedia no aparece en las noticias del mundo.
El P. Gabriel Romanelli destacó el "fuerte vínculo" de los cristianos de la Franja con el pontífice y su predecesor. La mayor esperanza es "poder vivir en nuestra tierra".