"No el de un mesías triunfador sino el del Señor que carga con el dolor de todos y nos invita a ser solidarios con Él, haciéndonos parte de esta misión", diferenció el arzobispo de Mendoza.
El arzobispo de Mendoza también recordó que la Palabra de Dios es "referencia y horizonte para nuestro amar y servir en Cristo".
"Jesús vino a enseñarnos a amar y a vivir no sólo la letra de las normas sino su espíritu que es misericordia, justicia y paz en el Señor", sostuvo el arzobispo de Mendoza.
"Ante los desafíos de la fe, estar con Jesús, seguir a Jesús, nos da la seguridad de estar plenamente unidos a la vida y de tener un proyecto hondo en el corazón", recordó el arzobispo de Mendoza.