Al menos dos iglesias católicas, un templo evangélico y tres hoteles de Sri Lanka fueron blanco de atentados terroristas este Domingo de Pascua. Las autoridades reportaron cerca de 300 muertos y alrededor de 500 heridos.
En su mensaje pascual, el obispo de San Isidro y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor Oscar Vicente Ojea, llamó a pedir para todos "con humildad" la virtud de la esperanza e instó a los católicos a transformar el mundo para hacerlo "más justo, más fraterno, más humano y cristiano".
El arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik OFMCap, recordó que los cristianos por haber sido bautizados, exclaman llenos de gozo: "¡Cristo vive, él es nuestra esperanza!", por lo que fueron enviando a "anunciar al mundo que no pertenecemos al reino de la muerte sino al reino de la vida".
"La Pascua es un espacio para la relación fraterna, hoy tan deteriorada en la Argentina y en el mundo. Nos debemos este mensaje y saludo pascual: ?¡No olvidemos que somos hermanos, hijos del mismo Padre!? Con estos sentimientos ofrezcámonos, los unos a los otros, cordiales saludos: ¡Felices Pascuas de Resurrección!", afirmó en su sugerencia para la homilía el arzobispo emérito de Corrientes, monseñor Domingo Salvador Castagna.