Francisco recibió a los jóvenes de la Fraternité Missionnaire des Cités, en peregrinación a Roma, y los invitó "a vivir generosamente la fraternidad en los barrios".
Durante su audiencia con unos 500 miembros de la Fraternidad Romena, Francisco afirmó que el mundo de hoy, marcado por la violencia y los conflictos, necesita fraternidad, paz y amistad.
Católicos, judíos, metodistas y evangélicos participaron de un encuentro interreligioso en la Plaza de las Banderas, donde pidieron "luz, amor y armonía para crecer en la convivencia fraterna".
En una entrevista al periódico estatal emiratí Al Ittihad, Francisco instó a que la libertad de expresión no se utilice como "excusa para ofender a los demás".