El nuncio apostólico en Chile transmitió las palabras del pontífice, especialmente, a los familiares de los trabajadores muertos y pidió acompañar a quienes están viviendo esta dolorosa pérdida.
En un violento atentado perpetrado por sujetos armados en la sede de la compañía minera La Poderosa, en la provincia de Pataz, al noroeste del Perú, fueron asesinados 10 trabajadores.
Un cortocircuito derivó en un incendio en una mina de Yanaquihua en la región de Arequipa (Perú), el cual dejó al menos 27 mineros muertos.
"No sé qué decir delante de ustedes, sólo decirles que estoy cerca", expresó el Papa a las familias de los mineros polacos fallecidos en las minas de carbón en abril del año pasado.