El Jubileo de los equipos sinodales: una conversión de las relaciones para 'ser uno'
- 24 de octubre, 2025
- Ciudad del Vaticano (AICA)
En el Aula Pablo VI, el cardenal Grech y otros ponentes llamaron a vivir una Iglesia más fraterna, esperanzada y solidaria, capaz de transformar las tensiones en comunión y profecía social.
Jubileo de los equipos sinodales en el Aula Pablo VI
Con el lema de "convertir las relaciones para ser uno", el Jubileo de los equipos sinodales y de los organismos de participación reunió el 24 de octubre a cientos de personas en el Aula Pablo VI del Vaticano.
En un clima de reflexión y esperanza, los ponentes invitaron a mirar hacia el futuro de la sinodalidad como un camino de comunión, conversión y misión.
El cardenal Mario Grech, secretario general de la Secretaría del Sínodo, abrió el encuentro evocando al poeta Charles Péguy y su visión sobre las virtudes teologales.
"La fe ve lo que es, la esperanza ve lo que será y la caridad ve lo que es", citó, subrayando que esa esperanza arraigada en Cristo es brújula para el proceso sinodal.
"No se trata de optimismo ciego -dijo-, sino de una certeza confiada en quien tiene el futuro en sus manos". La unidad, añadió, no significa uniformidad, sino acogida de la realidad "tal como es".

El cardenal Grzegorz Rys, arzobispo de Lodz (Polonia), profundizó en las tensiones que la sinodalidad pone en evidencia: entre el "yo" y el "nosotros", entre "unidad y uniformidad", y entre "preservación y misión". Invitó a superar el individualismo contemporáneo y a dejarse transformar por una "conversión relacional" que haga de la Iglesia un verdadero espacio de comunión.
"Solo una Iglesia pobre para los pobres puede abrazar a toda la familia humana", afirmó.
Nadie es autosuficiente en la Iglesia
El teólogo portugués Miguel De Salis Amaral, profesor de la Pontificia Universidad de la Santa Cruz, centró su exposición en la interdependencia entre el sacerdocio ministerial y el sacerdocio común.
"Nadie es autosuficiente en la Iglesia", recordó, explicando que los vínculos nacidos del Bautismo y del Orden son el fundamento de una comunidad viva que no se reduce a una simple organización.
La sinodalidad, profecía social
Por su parte, la brasileña Mariana Aparecida Venancio definió la sinodalidad como una "profecía social" y un antídoto ante las polarizaciones que hieren tanto a la Iglesia como a la sociedad.
Inspirada en las palabras del papa Francisco, exhortó a pasar del "yo" al "nosotros eclesial", promoviendo el diálogo y la escucha mutua.
"Es posible construir comunión sin uniformar, y denunciar las causas que perpetúan las desigualdades y exclusiones", señaló.
Moderado por el obispo Luis Marín de San Martín, subsecretario de la Secretaría General del Sínodo, el encuentro se desarrolló en un tono de discernimiento y esperanza.
En palabras del cardenal Grech, "la esperanza ama aquello que aún está por venir": un horizonte que resume el espíritu del camino sinodal hacia una Iglesia más fraterna, abierta y unida en Cristo.+
