Jueves 18 de abril de 2024

Las diócesis argentinas celebraron a la Virgen del Valle

  • 27 de abril, 2020
  • Buenos Aires (AICA)
En el marco del Año Mariano Nacional, y en la fecha en que se hubiera desarrollado en Catamarca el Congreso Mariano
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Las diócesis argentinas celebraron el 25 de abril a Nuestra Señora del Valle, a 400 años del hallazgo de su imagen en la Gruta de Choya.



El grado de “memoria obligatoria” fue concedido por la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos a fin de que “toda la Iglesia en la Argentina esté espiritualmente unida y en cercanía y comunión” con el pueblo de Catamarca.



De este modo, a pesar de haberse suspendido el Congreso Mariano Nacional por causa de la pandemia del Covid-19, los fieles de todas las diócesis honraron este fin de semana a la Virgen Morenita.



Córdoba

En una misa celebrada en la parroquia Nuestra Señora del Valle, el arzobispo de Córdoba, monseñor Carlos José Ñáñez, expresó: “El Congreso Mariano tenía como finalidad promover, profundizar y afianzar la devoción a María, la Madre del Señor Jesús, devoción que tiene un profundo arraigo en nuestro país, en cada una de sus regiones”.



“A la luz de la fe, el cristiano discierne el lugar singular que María Santísima tiene en el designio salvador de Dios, nuestro Señor. Ella es la cooperadora generosa y fiel en ese designio, desde su ‘sí’, confiado y total en la anunciación, hasta su ‘sí’ esforzado, generoso y dolido al pie de la cruz en el calvario”.



“La devoción a la Santísima Virgen se fundamenta en el querer de Jesús. De esa manera, el que acoge y honra a María, acoge y honra a su hijo Jesús. Por ello, se suele decir: ‘A Cristo, por María’”.



» Texto completo de la homilía



Corrientes

El arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik OFMCap, envió un mensaje a la comunidad parroquial de Nuestra Señora del Valle. En una situación que “no esperaba nadie”, el prelado aseguró: “La Virgen nos enseña a asumir adversidades, ella es una verdadera maestra en esto”.



El prelado recordó: “Dios, para comunicarse con nosotros se vale de muchos medios: el más importante es la Palabra, pero también lugares, fenómenos físicos, cuevas, otros lugares más espectaculares como pueden ser santuarios… Busca de todas maneras acercarse a nosotros para que podamos conocerlo, saber qué desea de nosotros, experimentar cuánto nos ama”.



“La que tuvo la sensibilidad muy especial, preparada de antemano por el amor de Dios, para reconocer la presencia y la actuación de Dios, fue María. De ella podemos decir que fue ese santuario completo, delicadamente preparado que acogió la presencia de Dios en medio nuestro. Gracias a ella, podemos escuchar su Palabra y ser transformados profundamente. Por eso ella es la que sostiene nuestra vida en dirección a Él”.



Rosario

En una misa en la parroquia Nuestra Señora del Valle, el arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Eliseo Martín, expresó: “La Virgen nos acompaña como nuestra Señora, nuestra Reina de la Iglesia. Y ella lo ha ido haciendo de muchos modos, y a veces queriéndose también manifestar de un modo particular para hacernos más cercanos a su hijo Jesús, para llevarnos con más facilidad hacia Cristo. Y una de esas manifestaciones ha sido la del Valle de Catamarca hace 400 años”.



El arzobispo destacó “esta protección y amparo, esta gracia que tantos peregrinos han ido obteniendo a lo largo de 400 años en el santuario de Catamarca y en otros tantos lugares, como aquí en esta parroquia que está dedicada a la Virgen del Valle”.



“La Virgen siempre se revela a los humildes. Aquí son los indígenas. Jesús se manifiesta a los humildes”, recordó monseñor Martín. Por eso, le pidió a la Virgen “que nos dé un corazón manso y humilde, pobre y sencillo, para que se nos abran cada día los misterios del Reino de Dios”.



Lomas de Zamora

El obispo de Lomas de Zamora, monseñor Jorge Lugones SJ, evocó en su homilía del domingo la fiesta de la Virgen del Valle que la Iglesia en Argentina celebró el sábado 25, y de modo especial, los 400 años de su hallazgo. “Es la Virgen que protege a su pueblo, la Virgen que en esta semana nos ha dado, por su intercesión, la noticia tan linda del milagro aprobado y obrado por Fray Mamerto Esquiú para su próxima beatificación”.



Fray Mamerto Esquiú, añadió, “tanto tuvo que ver en los albores de nuestra patria cuando se estaba constituyendo y cimentando; era catamarqueño, qué coincidencia para algunos, qué gracia para nosotros. La Virgen nos acompaña en este caminar, la Virgen con su manto cubre al pueblo argentino, ese manto celeste y blanco tan significativo y esa mirada de María y sus manos juntas que una y otra vez ora por su pueblo, acompaña a su pueblo y siempre nos lleva a Jesús, al caminante, al peregrino que nos invita siempre a salir, andar y llevar el mensaje de salvación del Evangelio”.



Mar del Plata

El obispo de Mar del Plata, monseñor Gabriel Mestre, destacó: “Estamos celebrando el corazón de lo que es este Año Mariano Nacional, al conmemorar los 400 años de la presencia de la advocación de Nuestra Señora del Valle de Catamarca, una de las grandes advocaciones marianas de nuestra Patria argentina”.



“Este Año Mariano muchos íbamos a viajar a Catamarca: laicos, consagrados, sacerdotes, obispos, para poder celebrar desde ese lugar, y obviamente no lo pudimos hacer. Que hoy podamos descubrir a María como peregrina, como caminante a lo largo de nuestra vida”.



“Que la Virgencita del Valle pueda acompañar el caminar de nuestra vida, de nuestra historia, de nuestro ser justamente ‘discípulos de Emaús’ en todo momento y en toda circunstancia. Que en estos 400 años de Nuestra Señora del Valle seamos capaces de descubrir el abrazo materno, hoy que tanta falta nos hace”.



“Qué lindo desde la fe descubrir el abrazo de la Madre, el abrazo de la bienaventurada Virgen María, bajo la advocación de Nuestra Señora del Valle que hoy acompaña la vida de nuestra Patria, la realidad de los más pobres, vulnerables, necesitados; la realidad de los enfermos, los enfermos de coronavirus, aquellas familias que los acompañan, el personal sanitario que está cuidando y acompañando de manera particular a aquellos que están enfermos”.



Nueve de Julio

En el día de Nuestra Señora del Valle, y recordando el lema del Año Mariano Nacional, “Con María, servidores de la esperanza”, el obispo de Nueve de Julio, monseñor Ariel torrado Mosconi, hizo un fuerte llamado a la esperanza: “Tenemos que comunicar, gritar, y ‘contagiar’ -nunca mejor dicho- por todos los medios posibles esa esperanza venida de Dios que nos alienta, sostiene y reconforta. En la conversación con seres queridos por whatsapp, en las redes sociales, participando en colectas de alimentos, fabricando barbijos en casa y de otras “mil maneras nuevas como nos obligan estos tiempos”.



Tomando como ejemplo el testimonio del apóstol Pedro, exhortó a las comunidades y a cada fiel en particular a ser sembradores y mensajeros de esperanza en medio del temor, la angustia y la tentación del egoísmo que se dan en muchos casos en situaciones como estas”.



“Con cada gesto y acción esperanzada estoy preparando “el día después”, sostuvo, y exhortó vivamente a “caminar en la esperanza” como los discípulos de Emaús.



San Francisco

El obispo de San Francisco, monseñor Sergio Osvaldo Buenanueva, recordó que María “es discípula, escucha a su hijo Jesús y pone en práctica su Palabra. María está hoy en medio del pueblo, estamos celebrando a la Morenita, la Virgen del Valle”.



“La Virgen siempre está con el pueblo, acogiendo nuestras necesidades y llevándoselas a Jesús, enseñándonos a ser familia, a ser hermanos. Aquí está María, es nuestra Madre, aquí estamos también sus hijos. Que la Virgen los bendiga, y fuerza: con ella seguimos caminando y cantando”, expresó.



San Isidro

El obispo auxiliar de San Isidro, monseñor Martín Fassi, envió un mensaje con motivo de la celebración jubilar de la Virgen del Valle. “Nos sorprende esta fiesta en medio de esta situación de pandemia y de cuarentena, pero estaba pensando en compartir con ustedes cómo la Virgen nos ayuda muchísimo a vivir estos momentos”, expresó.



“Ya hace 400 años que con su presencia a través de la imagen de la Virgen del Valle va acompañando a nuestros pueblos, especialmente el noroeste de nuestro país”, señaló el obispo.



“¿Qué más dice la Virgen para este tiempo? Nos dice: ‘En la limitación de nuestras posibilidades surgen posibilidades nuevas, y eso lo sabe muy bien”, consideró, recordando el pesebre donde tuvo a Jesús porque “no había lugar para ellos”.



“Este tiempo es para vivir posibilidades nuevas”, afirmó monseñor Fassi, y recordando el pasaje de las Bodas de Caná, aseguró: “María, con su presencia, nos invita a que se despierte toda nuestra creatividad y en los límites de nuestras posibilidades, las nuevas posibilidades de Dios”.



San Luis

El obispo de San Luis, monseñor Pedro Martínez Perea, presidió la misa en la parroquia Nuestra Señora del Valle, acompañado por el párroco, presbítero Ignacio Ortiz. En su homilía, el prelado expresó su comunión con los hermanos catamarqueños.



“¿Cómo podríamos hoy nosotros vivir, honrar, imitar a Nuestra Señora del Valle? En este tiempo de pandemia, de cuarentena, tenemos que tener cuidado en relación a esta enfermedad: lavarse las manos, el uso del barbijo, el quedarnos en nuestras casas, salir lo menos posible, para evitar el contagio”, señaló.En ese sentido, animó a preguntarse si tenemos el mismo cuidado para el alma, “porque el coronavirus del alma es el pecado”.



“La Inmaculada es Nuestra Madre, nos educa, nos da luz, nos forma. Por eso cuando rezamos el rosario, la Virgen de alguna manera va modelando nuestra alma”, aseguró.



Finalmente, refiriéndose a la maternidad divina, animó a que “cada uno en nuestras casas ejerza esa maternidad espiritual, rezar por los que dudan, por los pecadores para que se conviertan, por los sacerdotes y los obispos, para que seamos santos, rezar por más fieles, por nuestras parroquias, por los moribundos, esa es la mejor maternidad”.+