El Papa continuó su catequesis sobre los pecados capitales y definió la ira como un vicio omnipresente y destructivo de las relaciones humanas, que se supera mediante el perdón y la reconciliación.
Este mes, el Papa anima a orar "para que los enfermos terminales y sus familias reciban siempre los cuidados y el acompañamiento necesarios, tanto desde el punto de vista médico como desde el humano".
Este domingo, Francisco denunció el sufrimiento en Myanmar, Medio Oriente, Ucrania, Haití y Estambul, al tiempo que reiteró su llamado a la paz. También recordó el Día Mundial de la Lepra
En su alocución previa a la oración mariana desde el balcón del Palacio Apostólico, el Papa pidió invocar a Jesús "donde sentimos que las cadenas del mal y del miedo aprietan con más intensidad".