En el contexto de la Misa Crismal en la catedral, el arzobispo de Mercedes-Luján les hizo esta propuesta a los sacerdotes de la diócesis y, en su homilía, puso el centro en el Espíritu Santo.
La decisión la adoptó el Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica. Mons. Mauricio Landra fue nombrado delegado pontificio para ejecutarla.
Como presidente, fue confirmado Mons. Mollaghan, y los demás integrantes serán Mons. Landra y el P. Luis Liberti SDV. Todos ellos se abocarán a la causa del obispo de San Nicolás, fallecido en 1977.
Unos 120 sinodales participaron de la asamblea guiada por el arzobispo Scheinig. El documento final compromete a ser testimonio vivo de una Iglesia misericordiosa en salida, participación y comunión.