El Santo Padre recordó los desafíos actuales de la humanidad. Fue en las meditaciones que preparó para la recreación de la vía dolorosa de Jesús de este Viernes Santo.
El Santo Padre se reunió este Jueves Santo con 70 presos a los que manifestó que aunque "no puedo este año hacer el lavatorio de los pies, sí puedo y quiero estar cerca de ustedes".
En la homilía preparada para la Misa Crismal celebrada en la Basílica de San Pedro, Francisco invitó este Jueves Santo a los sacerdotes a cultivar la lectura y la oración.
En su catequesis publicada, Francisco ofreció una reflexión sobre la parábola del Hijo pródigo y aseguró que, "nuestro Padre amoroso nos espera con los brazos abiertos".