Francisco recuerda el compromiso del expresidente estadounidense "con la causa de la reconciliación y la paz entre los pueblos".
El Papa Francisco había hecho un llamamiento a favor de esos convictos, que fue apoyado por los obispos estadounidenses y por asociaciones humanitarias.
Mientras el actual presidente se prepara para dejar el cargo, los prelados lo instaron a cambiar las sentencias de muerte federales actuales por penas de prisión, antes de que finalice su mandato.
El secretario de Estado del Vaticano le deseó al presidente electo "mucha sabiduría" y que, como prometió, pueda "acabar con las guerras", aunque "ni siquiera él tiene una varita mágica".