Roberto Barúa, Sergio Britez y Ernesto García recibieron su ordenación por imposición de manos del obispo diocesano, monseñor Carlos Tissera, en la catedral local.
Los neopresbíteros Luis Castro y Nicolás Figueroa fueron ordenados por el obispo diocesano, Mons. Gabriel Barba, quien los animó a "servir con hechos, sin la necesidad de palabras".
El arzobispo Jorge Lozano ordenó presbíteros a Pablo Montaño, Sergio Díaz y Renzo Gallo, y confirió el diaconado a Gastón Molina. Todos ellos fueron formados en el seminario Ntra. Señora de Guadalupe.
Los seminaristas Nicolás Apud y Mario Portal recibieron el orden presbiteral por la imposición de manos del arzobispo local, quien los invitó a "dejarse contagiar por el amor misericordioso de Jesús".