"Intervención internacional y alto el fuego inmediato, para evitar más pérdidas de vidas y dignidad humana", es el nuevo llamamiento urgente que hicieron desde la organización.
La organización denunció el aumento de la violencia y el riesgo de muerte para quienes buscan refugio en la única parroquia católica.
A pesar de los ataques con misiles iraníes contra Israel, la organización católica continúa su labor en un contexto peligroso y alarmante.
"Los niños mueren de desnutrición", lamentó Anton Asfar, presidente de Cáritas Jerusalén, en medio del polémico reparto de ayuda humanitaria que provocó la muerte de decenas de personas.