El papa León XIV exhorta a derribar prejuicios y construir paz

En una multitudinaria misa en Estambul, el pontífice llamó a fortalecer la unidad entre comunidades cristianas y con otras religiones, alentando a ser puentes de diálogo en un mundo herido.

En el Estadio Volkswagen Arena de Estambul, el papa León XIV presidió este 29 de noviembre una Eucaristía con la comunidad católica de Turquía, en el marco de su primer viaje apostólico a Turquía y el Líbano y de su peregrinación a Iznik por los 1700 años del Concilio de Nicea. Ante miles de fieles, el Santo Padre centró su homilía en un llamado urgente a la unidad, la reconciliación y la construcción conjunta de la paz.

El pontífice subrayó tres niveles esenciales de unidad: al interior de la Iglesia -que en esta región integra cuatro tradiciones litúrgicas-, en el diálogo ecuménico con otras confesiones cristianas y en el encuentro respetuoso con creyentes de otras religiones.

Caminar juntos
"Queremos caminar juntos? para dar a todos un fuerte mensaje de esperanza y una invitación a convertirse en artífices de la paz", afirmó.

La celebración coincidió con la víspera de la fiesta de san Andrés, patrono de esta tierra, y con el inicio del Adviento. En este contexto, el Papa invitó a preparar el corazón para la Navidad retomando la profecía de Isaías sobre el monte del Señor: un lugar donde todas las naciones encuentran luz y paz.

A partir de esta imagen, recordó que "la alegría del bien es contagiosa" y que la fe, vivida con coherencia, atrae y edifica.

Exhortó también a "vestirse con la armadura de la luz", dejando atrás toda oscuridad para ser testigos creíbles. El Señor -dijo- "viene cada día a llamar a nuestra puerta", y es en la vida concreta donde se manifiesta la conversión.

Levantar puentes
Otra imagen central de su homilía fue la del puente, inspirada tanto en el logotipo de este viaje como en los grandes viaductos que unen Asia y Europa a través del Bósforo.

Estas estructuras -señaló- evocan la misión de los cristianos: tender lazos, superar fracturas y generar encuentro. Desde esa perspectiva, alentó a reforzar los vínculos dentro de la comunidad y a perseverar en el esfuerzo ecuménico, renovando el deseo de la unidad por la que Cristo oró: "Que todos sean uno".

El Papa dedicó además un apartado al diálogo interreligioso, subrayando que, en un mundo donde la religión a veces se instrumentaliza para la violencia, los creyentes están llamados a derribar prejuicios y cultivar el respeto. Solo así, indicó, podrán ofrecer un testimonio auténtico de esperanza.

Al concluir, invitó a hacer de estos compromisos un camino concreto durante el Adviento: "Que nuestros pasos se muevan como sobre un puente que une la tierra con el cielo para caminar juntos y poder encontrarnos todos, algún día, en la casa del Padre".

Con palabras, el papa León XIV dejó a la comunidad un mensaje que busca resonar más allá de fronteras y credos: la paz comienza por el encuentro, y el encuentro exige caminar unidos.+