Martes 24 de junio de 2025

El Papa pide a los seminaristas amar con el Corazón de Jesús

  • 24 de junio, 2025
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
Al recibir a unos 4.000 seminaristas y formadores en la Basílica de San Pedro por su Jubileo, León XIV les ofreció una meditación sobre el Sagrado Corazón de Jesús y la vida sacerdotal.
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El papa León XIV recibió este martes a más de 4.000 seminaristas en la Basílica de San Pedro para su Jubileo. A pesar de un contexto marcado por el conflicto y el narcisismo, el Santo Padre invitó a los futuros sacerdotes a aprender a amar y a hacerlo como Jesús, con un corazón manso y humilde e instó a que el seminario sea una escuela de sentimientos para cada uno.

En su meditación el pontífice dijo a los seminaristas que están llamados a dar testimonio "de la gratitud y la gratuidad de Cristo, del júbilo y la alegría, de la ternura y la misericordia de su Corazón, a practicar un estilo de acogida y cercanía, de servicio generoso y desinteresado, dejando que el Espíritu Santo 'unga' su humanidad incluso antes de la ordenación".

Aprendiendo a amar como Jesús ama
El Santo Padre subrayó también la importancia de una formación "centrada en el corazón", de aprender "amar como Jesús amó".

Esto debe hacerse a través del desarrollo de la vida interior, primer trabajo de discernimiento, y supone volver al corazón, donde encontramos "huellas de Dios" y donde Dios nos habla.


El papa León XIV afirmó que la formación de la vida interior implica reconocer los sentimientos más profundos del corazón, "que ayudan a descubrir el rumbo de la propia vida". Señaló que el "camino privilegiado" que conduce a la interioridad es la oración, porque sin un encuentro con Dios, "no podemos conocernos verdaderamente a nosotros mismos".

Y los invitó a invocar frecuentemente al Espíritu Santo, "para que Él forme en ustedes un corazón dócil, capaz de percibir la presencia de Dios" en la naturaleza, en el arte, en la literatura, en la música y en la ciencia.

"Sobre todo -dijo el papa León- "aprendan a escuchar, como hizo Jesús, el grito a menudo silencioso de los pequeños, de los pobres y oprimidos, y de tantas personas, especialmente de los jóvenes, que buscan el sentido de su vida".

El Obispo de Roma invitó a los seminaristas a aprender a custodiar y meditar los acontecimientos de su vida, como lo hizo María, para aprender "el arte del discernimiento".

'Apasionarse por la vida sacerdotal
Finalmente, León XIV animó a los seminaristas a ser mansos y humildes de corazón, como lo fue Jesús; y como Pablo, a adoptar los sentimientos de Cristo para crecer en madurez humana y rechazar toda pretensión e hipocresía.


La tarea de los seminaristas, concluyó el pontífice, es "nunca conformarnos con menos, nunca estar satisfechos, no ser receptores pasivos, sino apasionarnos por la vida sacerdotal, viviendo el presente y mirando el futuro con corazón profético".

Antes de guiarlos en la proclamación del Credo de Nicea, el papa León expresó su esperanza de que los seminaristas profundicen su relación con Cristo, pidiéndole que hagan sus corazones como el Sagrado Corazón, "que late de amor por cada uno de ustedes y por toda la humanidad".+