Mons. Martín sobre Francisco: 'La alegría era su sello, su vida fue un testimonio de misericordia'

El arzobispo de Rosario presidió una misa por el Papa en la catedral y llamó a los argentinos a rendirle el mejor homenaje posible: la reconciliación y la unidad como pueblo.

El arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Martín, presidió este lunes en la catedral una misa por el eterno descanso del Papa Francisco. La celebración reunió a fieles, autoridades civiles y representantes de la comunidad local, entre ellos el Intendente de Rosario, Pablo Javkin.

En su homilía, el prelado recordó con gratitud la vida del pontífice argentino, al que describió como "un discípulo del Señor que sirvió a la Iglesia y a toda la humanidad". Recalcó que, aunque su muerte produce tristeza, "nos consuela la esperanza de la feliz resurrección", y aseguró que "su desaparición física no es una desaparición en el espíritu, porque en la Comunión de los Santos él sigue presente e intercediendo por todos".

A lo largo de su prédica, el arzobispo rosarino repasó los rasgos esenciales del pontificado de Francisco: su sencillez, su cercanía con la gente, su impulso misionero y su llamado constante a salir a las periferias, tanto geográficas como existenciales. También resaltó su defensa de los más pobres, su compromiso con los migrantes, el cuidado del medio ambiente, y su mensaje de alegría, expresado en documentos claves como Evangelii Gaudium, Amoris Laetitia y Laudato si'.

"La alegría era su sello. La alegría del Evangelio, la alegría del amor, la alegría de la santidad. Su vida fue un testimonio de misericordia", afirmó. En ese sentido, citó el deseo del Papa de que la Iglesia tenga como viga maestra la misericordia, y llamó a los argentinos a rendirle el mejor homenaje posible: la reconciliación y la unidad como pueblo.

La misa culminó entre aplausos, oraciones y una sentida emoción colectiva, en una catedral colmada que vibró al unísono en memoria del primer Papa argentino.+

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