Domingo 13 de octubre de 2024

Rosario cerró el Año Mariano destacando poder tener a la Virgen como fundadora

  • 8 de enero, 2024
  • Rosario (Santa Fe) (AICA)
"¡Esa es nuestra identidad! Rosario es Rosario por la Virgen", se destaca en una reflexión por el fin del jubileo por los 250 años de presencia de la advocación de Nuestra Señora del Rosario.
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“¡Qué lindo poder celebrar juntos a la Virgen! ¡Estemos felices de tener a la Virgen como patrona y fundadora de esta ciudad y arquidiócesis!”. Con esta frase monseñor Eduardo Martín, la arquidiócesis de Rosario cerró el 7 de enero su Año Mariano.

“Con María del Rosario misionamos por la paz”, fue el lema que guió las celebraciones. Durante este año, se rezó por la paz y la imagen de la Virgen del Rosario fue recibida en los hogares. También se otorgaron indulgencias. 

La Pastoral de Comunicación de la arquidiócesis de Rosario publicó una reflexión a modo de cierre con el título “El Año Mariano llega a su fin”, la que comienza con una frase del primer obispo diocesano, Antonio Caggiano, quien expresaba: “¡Dichosa, pues, nuestra gran familia rosarina, nacida y desarrollada en su vida religiosa, al calor de la devoción y con la protección de la Virgen del Rosario!”.

“Nuestra ciudad nace bajo la protección de la Virgen del Rosario y crece alrededor de su amor. Nuestra arquidiócesis es creada bajo la protección de la bienaventurada Virgen del Rosario”, se destaca.

Asimismo, se indica -citando a monseñor Martín- que “cada pueblo y cada ciudad de esta Iglesia que peregrina en Rosario está dedicado a la Virgen del Rosario, a esa ‘mujer única en la historia, la mujer más hermosa porque está llena del amor de Dios, la mujer más libre porque ha sido obediente y la mujer más fuerte porque ha perseverado en la voluntad de Dios’”.

“¡Y esa es nuestra identidad! Rosario es Rosario por la Virgen. Dios lo quiso así, tenemos que estar agradecidos y siempre volver a pasar por el corazón esto: Dios está medio nuestro y nos dejó a su Madre como fundadora y patrona”, se sostiene.

“Por eso, se recuerda, San Juan Pablo II en 1987 nos decía que estaba emocionado por estar en este lugar ‘dedicado a la Santísima Virgen del Rosario, venerada en este lugar desde hace más de dos siglos’”.

Tras afirmar que “la Virgen que nos reúne en nombre del Señor es nuestra madre y fundadora”, se destaca: “María nos acompaña y llevamos nuestras intenciones a Ella porque como nos decía el Papa Francisco en 2018 para el Encuentro Nacional de Jóvenes que se realizó en nuestra ciudad: ‘María, es Madre de la cercanía y la ternura, Señora del corazón abierto y siempre disponible para ir al encuentro de quienes la necesitan, sea su maestra en el modelo de la vida de fe’”.

“No son fáciles los tiempos que vivimos, se subraya, pero con la ayuda del Señor Jesús y la maternal intercesión de la Virgen del Rosario, caminamos en la fe y la esperanza, porque como nos decía monseñor Eduardo Mirás: ‘María nos enseña cómo ser pacientes frente a las repetidas dificultades; cómo ser fuertes ante lo arduo de los problemas que enfrentamos; cómo ser solidarios y serviciales ante las necesidades de los otros; cómo disponernos a aceptar la voluntad de Dios en nuestra vida, cuando las cosas no salen como las planeamos’”.

“Sí, qué lindo es tener una Madre que camina en medio nuestro para llevarnos a Jesús. ¡Viva Jesús! ¡Viva la Virgen del Rosario!”, concluye la reflexión.+