El obispo castrense presidió la ordenación sacerdotal del diácono Agustín Cañamero, en la parroquia Nuestra Señora de Luján Castrense de la Ciudad de Buenos Aires.
                        Con este decreto, el obispado castrense consolida la figura de san Carlo Acutis, proponiéndolo como guía espiritual para los jóvenes militares y especialistas que desarrollan su servicio digital.
                        El obispo castrense presidió la XXII Peregrinación de las Fuerzas Armadas y Federales a Luján, donde la Virgen fue reconocida como comandante generala de la Gendarmería Nacional Argentina.
                        "Nuestra tarea es iluminar la historia con la luz de la fe", afirmó el obispo castrense y llamó a mirar el pasado con verdad, memoria y espíritu de perdón. La obra es autoría de Sebastián Miranda.