Mons. Pedro Laxague lamentó que los daños causados por la reciente tormenta ya no estén en "las noticias del día" aunque las necesidades de los afectados son muchas y urgentes.
Participaron unas 100 personas, se expuso sobre el trabajo realizado en los últimos tres años y se designaron a los nuevos integrantes de la Comisión Diocesana para el siguiente trienio.
Convocadas por la Comisión Diocesana de Justicia y Paz, distintas entidades se reunieron para armar un espacio de diálogo y colaboración, para analizar la realidad local y buscar soluciones concretas.
Se llevaron a cabo en la ciudad de Dolores, habiendo sido convocadas por el obispo local, Mons. Juan Liébana, quien impartió una iluminación teológico-pastoral sobre la parábola del buen samaritano.