Card. Sandri: El Papa Francisco deja un legado de servicio y visión
- 30 de abril, 2025
- Ciudad del Vaticano (AICA)
Al presidir la quinta misa de Novendiales, el vicedecano del Colegio Cardenalicio recordó a los cardenales presentes que, como sucesores de los apóstoles, no deben olvidar que "gobernar es servir".

El cardenal argentino Leonardo Sandri, vicedecano del Colegio Cardenalicio, presidió la quinta misa en sufragio del Papa Francisco.
En su homilía destacó que su compatriota vivió con particular intensidad uno de los títulos del Obispo de Roma: Servus Servorum Dei, Siervo de los Siervos de Dios. Sandri recordó a los cardenales presentes que, como sucesores de los apóstoles, no deben olvidar que "gobernar es servir".
Sandri inició su reflexión proclamando "Cristo ha resucitado" y señaló que en este tiempo de Pascua la Iglesia se encuentra entre dos momentos importantes: el fin del papado del papa Francisco y el comienzo de uno nuevo. En pocos días, dijo, el cardenal protodiácono volverá a salir al balcón de San Pedro para anunciar el nombre del nuevo papa. Ese papel, añadió el cardenal Sandri, "encuentra su significado en la experiencia pascual de Cristo".
Recordando juntos, orando juntos
El cardenal Sandri explicó que la misa de Novendiales no es solo un momento de duelo, sino un momento para que la Iglesia se reúna, ore, recuerde y reafirme su fe en la Resurrección.
Los cardenales se reúnen no solo como colaboradores del Papa, dijo el cardenal Sandri, sino también llevando consigo las oraciones de personas de todo el mundo: desde Tonga hasta Mongolia, desde Teherán hasta Jerusalén, y de lugares donde los cristianos son una presencia pequeña pero fiel, como Marruecos y Argelia.
"Estamos llamados cada día a recordar y vivir conscientemente la verdad de que reinar es servir", dijo el cardenal, citando al Papa Francisco, antes de subrayar que es con este espíritu que Francisco vivió su papado: a través de sus acciones, sus viajes y su constante cuidado por los marginados.
El título "Siervo de los Siervos de Dios", usado en su día por el Papa Gregorio Magno, fue importante para el Papa Francisco, quien siguió recordando a la Iglesia que en el fondo, debe siempre servir, dijo el purpurado argentino.
Desde las Escrituras hasta hoy
Al reflexionar sobre la lectura de los Hechos de los Apóstoles, el cardenal Sandri señaló que el discurso de Pedro en Pentecostés fue elegido no solo porque marcó el inicio de la Iglesia, sino también porque habla de plenitud. Esto también reitera que, así como Pentecostés marcó un nuevo comienzo para los apóstoles, la Iglesia hoy se prepara para un nuevo capítulo.
Luego recitó un versículo del profeta Joel, frecuentemente citado por el papa Francisco: "Derramaré mi Espíritu sobre todo el pueblo. Sus hijos e hijas profetizarán, sus ancianos soñarán, sus jóvenes verán visiones".
El vicedecano del Colegio Cardenalicio señaló que el papa Francisco solía relacionar este pasaje con la importancia de conectar generaciones. "No hay futuro sin este encuentro entre viejos y jóvenes", explicó.
Un sueño para la Iglesia
Al concluir su homilía, el cardenal Sandri señaló que el papa Francisco ya había dejado una visión para el futuro de la Iglesia. En la Bula de Invocación para el Jubileo de 2025, se refirió a otro aniversario importante: los 2000 años de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo, que se celebrarán en 2033.
"Este Año Santo guiará el camino de los cristianos, para que espiritualmente todos podamos convertirnos en peregrinos hacia Tierra Santa y proclamar una vez más: "¡El Señor resucitó verdaderamente y se apareció a Simón!", concluyó el cardenal.+