El Vaticano elogia la monogamia y rechaza el 'poliamor' en nueva nota doctrinal
- 25 de noviembre, 2025
- Ciudad del Vaticano (AICA)
El Dicasterio para la Doctrina de la Fe presentó una reflexión sobre "el valor del matrimonio como unión exclusiva y de pertenencia recíproca".
El Dicasterio para la Doctrina de la Fe publica una Nota doctrinal sobre el valor del matrimonio
El Dicasterio para la Doctrina de la Fe (DDF) publicó la nota 'Una Caro' Elogio de la monogamia (Una sola carne), que se presenta como un "elogio de la monogamia", reafirmando el valor del matrimonio como "unión exclusiva" y rechazando formas contemporáneas de relación como el "poliamor".
"En Occidente están creciendo diversas formas públicas de unión no monógama -a veces llamadas 'poliamor'-, además de las más reservadas o secretas que fueron comunes a lo largo de la historia", indica el texto, aprobado por el papa León XIV y firmado por el cardenal Víctor Manuel Fernández, prefecto del DDF.
Razones del documento
La declaración del Vaticano llega como respuesta a un contexto global donde el valor del amor exclusivo es "fácilmente oscurecido" por el desarrollo tecnológico y cultural.
"El mundo de las redes sociales, donde desaparece el pudor y proliferan formas de violencia simbólica y sexual, muestra la urgencia de una nueva pedagogía", advierte el documento, subrayando que el amor no puede reducirse a un "impulso".
La nota doctrinal también está motivada por el diálogo con obispos de África sobre la poligamia, un tema que llevó a la creación de un grupo de trabajo, tras la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos (2023-2024), para "promover el discernimiento teológico y pastoral sobre la poligamia y acompañar a las personas en uniones polígamas que se adhieren a la fe".
El DDF destaca, en la nueva nota, que "estudios profundos sobre las culturas africanas muestran que diversas tradiciones atribuyen especial importancia al primer matrimonio entre un hombre y una mujer y, sobre todo, al papel que la primera esposa está llamada a desempeñar en relación con las demás esposas".
"De hecho, las investigaciones indican que la poligamia es una práctica tolerada debido a las necesidades de la vida (ausencia de hijos, matrimonio levirato, trabajo para la supervivencia, etc.)", añade el texto.

La poligamia, el adulterio o el poliamor se basan en la ilusión de que la intensidad de una relación reside en la sucesión de rostros. Como ilustra el mito de Don Giovanni, el número disuelve el nombre: dispersa la unidad del impulso amoroso.
El Vaticano reconoce una falta de producción teológica sobre la unidad del matrimonio, entendido como "la unión única y exclusiva entre un hombre y una mujer".
La nota doctrinal sostiene que la unión sexual sólo puede respetar la dignidad de la persona si se produce en un contexto de pertenencia exclusiva, citando el pensamiento de Karol Wojtyla (San Juan Pablo II): "la monogamia estricta es una manifestación del orden personalista".
No profanar la libertad del otro
El documento advierte de los riesgos de la "posesión indebida" del otro, aclarando que la "pertenencia recíproca" no significa negar la libertad o la identidad individual.
"En la lógica de la dominación, incluso quienes dominan terminan negando su propia dignidad", afirma el DDF, insistiendo en que un matrimonio saludable requiere "ese nivel de respeto y admiración que son parte de todo amor sano, que nunca busca absorber al otro".
La nota enfatiza la dimensión unificadora de la sexualidad, rechazando visiones "rigurosas" o "maniqueas" que sólo toleran el placer sexual en función de la procreación.
"Situar la sexualidad en el marco de un amor que une a los esposos en una única amistad, buscando el bien del otro, no implica una devaluación del placer sexual", se lee.
El Vaticano aborda también la fecundidad del matrimonio más allá de la procreación biológica, asegurando que las parejas que no pueden tener hijos conservan "el pleno valor de la institución", ya que la esencia del matrimonio es "constituir una unión de dos personas".
En un llamado a la educación de las nuevas generaciones, la nota doctrinal propone el noviazgo como un "tiempo de prueba y maduración", donde el otro es acogido como "promesa de infinito", contrarrestando la banalización del adulterio y la fragilidad de las uniones actuales.
Nuestra era está experimentando diversos cambios en la percepción del amor: un aumento de los divorcios, relaciones frágiles, la trivialización del adulterio y la promoción del poliamor. Ante esto, es necesario reconocer que las principales narrativas colectivas (novelas, películas, canciones) siguen exaltando el mito del "gran amor" único y exclusivo, señala el DDF.
La paradoja es evidente: las prácticas sociales socavan lo que el imaginario colectivo celebra. Esto revela que el deseo de amor monógamo permanece profundamente arraigado en los seres humanos, incluso cuando los comportamientos parecen contradecirlo.
La nota doctrinal sostiene que la educación para la monogamia "no constituye una restricción moral, sino una iniciación en la grandeza de un amor que trasciende la inmediatez".
"Dirige la energía erótica hacia una sabiduría de la duración y una apertura a lo divino. La monogamia no es arcaísmo, sino profecía", señala el Vaticano.+
