Los obispos bolivianos exhortan al diálogo, la unidad y la esperanza en el país
- 8 de mayo, 2025
- La Paz (Bolivia) (AICA)
"Una Bolivia mejor es posible", expresa la Conferencia Episcopal Boliviana en un mensaje al pueblo de Dios en ocasión de la 116ª Asamblea Plenaria.

"¡No nos cansemos de creer que una Bolivia mejor es posible!", animaron los obispos bolivianos en su Mensaje al Pueblo de Dios titulado "La Iglesia en Bolivia: signo de libertad y esperanza", con ocasión de la 116ª Asamblea de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), una reflexión sobre la situación del país y una exhortación al diálogo, la unidad y la esperanza.
Signos de esperanza
La lectura del mensaje estuvo a cargo del secretario general de la CEB, monseñor Giovani Arana, y fue seguida por una rueda de preguntas respondida por el presidente de la CEB, monseñor Aurelio Pesoa Ribera OFM.
El mensaje inicia con el saludo pascual: "Cristo ha resucitado, ¡Aleluya!", señalando la fuerza de la fe cristiana en tiempos de incertidumbre: "Nos hemos conmovido por la presencia masiva del pueblo de Dios en las celebraciones de Semana Santa, signos de fe y de fortaleza frente a los desafíos de la vida actual", afirmó monseñor Arana al dar lectura al documento.
Los obispos destacaron también su adhesión a las celebraciones por el bicentenario de Bolivia, subrayando el compromiso histórico de la Iglesia con la evangelización, la defensa de los derechos humanos y el servicio a los más necesitados: "Renovamos el compromiso en el servicio social a los más pobres, en la defensa de los derechos humanos, de la mujer y de nuestros hermanos indígenas", se lee en el mensaje.
Crítica a la situación del país
No obstante, el texto denuncia con firmeza la crisis estructural que enfrenta Bolivia, señalando signos alarmantes de descomposición institucional, social y económica: "Constatamos que vivimos en una Bolivia destrozada en su identidad cultural y social", afirman los obispos. Denuncian además que "se alienta la institucionalización de la mentira y el engaño imperando la demagogia que mata la democracia".
Sobre la economía, se señala el deterioro progresivo: "El modelo económico estatal monopolista destruye sistemáticamente la economía y la propiedad privada", lo que conlleva, según los obispos: al empobrecimiento del país, a la fuga de capital humano y al colapso de sectores clave como hidrocarburos y exportaciones.
A pesar del panorama crítico, la CEB hizo una exhortación a la unidad y a la reconstrucción del país desde la fe y el compromiso ciudadano: "Ser Peregrinos de esperanza requiere asumir el imperativo de un encuentro y un sincero diálogo para construir en consenso un pacto de unidad".
En este marco, consideran las elecciones presidenciales como una oportunidad para encauzar el rumbo del país, e incitan al pueblo a ejercer el voto de manera libre, responsable y sin presiones antidemocráticas.
Amnistía jubilar
Un punto destacado fue la propuesta de una amnistía jubilar: "Reafirmamos la fuerza de la esperanza proponiendo una amnistía que abra las puertas a los que perdieron su libertad".
"¡No nos cansemos de creer que una Bolivia mejor es posible!", concluyen los obispos, confiando en la fuerza transformadora de la fe y el compromiso de todos los bolivianos: "Dios acompaña nuestros gozos y tristezas: nuestro Señor Jesucristo resucitado nos dice '¡no tengan miedo, yo he vencido al mundo!'".+