Jueves 28 de marzo de 2024

Mons. Canecín: "En la Sagrada Familia de Nazaret contemplamos lo más perfecto"

  • 6 de julio, 2020
  • Itatí (Corrientes) (AICA)
En el tercer día de la Novena en honor de Nuestra Señora de Itatí, el obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecín, tuvo a su cargo la homilía.
Doná a AICA.org

“En la Sagrada Familia de Nazaret contemplamos lo más perfecto”, afirmó el obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecín, en la homilía del tercer día de la novena a Nuestra Señora de Itatí, que lleva el lema “María, Madre del pueblo, esperanza nuestra”. Las celebraciones  se realizan sin la participación de fieles diariamente a las 19, con la misa y el rezo de la novena.

La tercera jornada estuvo dedicada a rezar por las familias. Monseñor Canecín ayudó a reflexionar sobre el rostro de María, madre de familia, e hizo notar que “estamos en la casa de la Madre, la madre común, nuestra Señora de Itatí, madre y patrona, no sólo de Corrientes, sino de todo el Nordeste Argentino”.

Además señaló que “hace ya más de 400 años que la tenemos con nosotros, prodigando amor, ternura, compasión, acogida y misericordia” y en el marco de esta novena, recordó que "en este Año Mariano Nacional, para el que nos habíamos preparado con tanto entusiasmo, con tanta alegría, para participar del Congreso Mariano, que por la pandemia fue suspendido, y también todas las otras actividades previstas, “el Espíritu Mariano, no lo perdemos. La devoción a María se acrecienta, se agiganta, se enternece”, afirmo.

Al reflexionar sobre el tema del tercer día: “María,  Madre de familia”, dijo “¡Qué hermoso! Nuestro Dios es Dios familia, Dios Amor, Dios Trinidad, de tal palo tal astilla, somos su comunidad”.

“Cuando el Hijo de Dios se hizo hombre, quiso hacerse hombre, porque así el Padre lo dispuso, pero en el contexto de una familia. Permitió que le falte todo, se despojó de todo, pero no quiso que le falte la familia, el calor de la familia, una mamá, María, y la presencia del papá, en el silencioso José, esposo de María”.

Finalmente, al reiterar que “la Virgen María es madre de familia”, aseguró que “la experiencia de la familia la tenemos todos, de una u otra manera”, pero en la Sagrada Familia de Nazaret, “contemplamos lo más perfecto, lo más sublime de la familia: perfección y sublimidad, que no la distancia, sino que la acerca a toda experiencia de familia”.

Antes de la bendición final, hizo su entrada la Imagen peregrina de la Virgen de Itatí, a la que se le rezó su oración pidiendo su intercesión por los enfermos y  especialmente  por las víctimas de la pandemia. Luego se entonó el Himno a la patrona de Corrientes y pueblos del NEA, y los sacerdotes impartieron la bendición.+